El Instituto Politécnico Nacional (IPN) inició la fabricación de sus propios termómetros infrarrojos digitales, esto ante la escasez de dichos insumos médicos y como parte de la preparación a la nueva normalidad en la que se instalarán filtros sanitarios para el acceso a sus instalaciones, una vez que se reanuden las actividades.
En entrevista con MILENIO, el Dr. Marco Antonio Moreno Ibarra, director del Centro de Investigación en Computación del IPN, dijo que “hay una carestía de este tipo de dispositivos o están bastante caros".
- Te recomendamos Ante coronavirus, UNAM y Tec de Monterrey crean careta Salud
"El director general del IPN (Mario Alberto Rodríguez Casas) nos instruyó para realizar este proyecto. Lo que hicimos fue trabajar en un diseño que tomara la tecnología que está disponible y estuviera al alcance nuestro para integrarla, ya que este tipo de termómetros son costosos y sobre todo ahora con la pandemia; comercialmente podrías encontrarlo en 500 pesos o uno más sofisticado por mil pesos, pero están agotados o les triplicaron el costo”, explicó.
El académico informó que se prevén fabricar dos lotes de 300 termómetros en total, uno para la propia institución y el segundo a solicitud del gobierno de la Ciudad de México, a través de un convenio que se firmará con la Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (Sectei); piezas que se prevén estén listas en mes y medio.
“Ahorita ya en este momento tenemos un prototipo funcional que hicimos sobre la carcasa de un teléfono celular viejo, sobre eso está el prototipo funcionando. Estamos identificando los materiales para hacer la carcasa, que sea bastante económica, podríamos imprimirlo en esas impresoras de tres dimensiones, pero el costo se nos dispara mucho.
"Entonces tenemos que identificar una carcasa que sea bastante económica y que además a lo mejor el sistema para asegurar todos los componentes al interior sea un tornillo o que sea algo bastante rápido para armar”, explicó.
El termómetro infrarrojo digital el IPN está diseñado para medir la temperatura de una persona en segundo y a una distancia de 20 centímetros, para evitar el contacto, debido a su LED infrarrojo que se apunta sobre la frente y su sensor que mide la temperatura entre 33 y 34 grados.
“Va a ser el dispositivo de batalla, donde todos los accesos van a tener que estar controlados, monitoreando la temperatura de nuestros alumnos, profesores, al menos en el instituto se utilizaran en el regreso a clases”, indicó.
irh