La coordinadora del PRD en la Cámara de Diputados, Verónica Juárez, calificó como un “acto criminal” la decisión presidencial de priorizar el ahorro de recursos públicos por encima del tratamiento a niñas y niños con cáncer.
El secretario de Salud (Ssa), Jorge Alcocer, afirmó en La Mañanera que el gobierno federal ha ahorrado más de 11 mil millones de pesos en la compra de medicamentos, al romper la concentración de las compras gubernamentales a solo diez empresas en sexenios pasados.
Verónica Juárez subrayó que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha presumido el supuesto combate a la corrupción de las farmacéuticas, pero dejando sin tratamiento y medicamentos a cientos de menores con cáncer en los hospitales públicos de salud y cuyas familias carecen de recursos para atenderlos en instituciones privadas.
“Lo que hay que decir con toda claridad es que, en afán de presumir una lucha contra la corrupción que no es tal, el Presidente sacrificó la vida de cientos de niñas y niños con cáncer que se pudieron haber salvado si las autoridades de salud hubieran actuado con mayor eficiencia y responsabilidad”, remarcó.
La legisladora perredista sostuvo que la lucha contra la corrupción no debe estar peleada con la responsabilidad del gobierno de garantizar el derecho a la salud y el interés superior de la infancia.
“La negligencia, el desmantelamiento de las cadenas de abasto, la incapacidad de las autoridades, la reducción del presupuesto al sector y el descuido de no destinar espacios a pacientes con enfermedades graves durante la pandemia provocó que niñas y niños con cáncer no fueran atendidos ni recibieran sus medicamentos por parte del ISSSTE y del IMSS, mucho menos del Insabi, que no termina de organizarse”, acusó.
La diputada señaló que, de acuerdo con un informe de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños y Niñas con Cáncer (Amanc), mil 602 pacientes infantiles con cáncer habían fallecido hasta septiembre de 2020 como consecuencia de los recortes al gasto para tratamiento y medicinas.
La Amanc advirtió desde entonces “deficiencias en el sector salud” y “dificultades socioeconómicas y culturales de las familias” ante el padecimiento. La dirigente parlamentaria del PRD consideró irresponsable no haber definido opciones de atención para este grupo de pacientes mientras se buscaban alternativas de abasto.
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