La fracción del PRD en la Cámara de Diputados emplazó al presidente electo Andrés Manuel López Obrador y a Morena a someter a consulta pública la reducción de precios de las gasolinas.
“Nosotros queremos poner en la mesa esa consulta, que es la que compete a los mexicanos y tiene que ser la eliminación del impuesto especial en las gasolinas: esa tiene que ser la próxima consulta”, puntualizó Ricardo Gallardo, coordinador de la bancada perredista en el Palacio de San Lázaro.
Remarcó que el PRD está de acuerdo en los ejercicios de consulta, pero dejó claro que esa práctica debe darse desde la legalidad y con efectos vinculantes, no como se ha hecho, mediante la manipulación y la demagogia.
“El presidente electo está simulando un ejercicio democrático, y quiere seguir poniendo a consideración de la ciudadanía lo que a su capricho conviene, y no lo más urgente o necesario para la población, como es la posibilidad de disminuir el precio de los combustibles, que tendría un efecto inmediato y muy favorable para la gente”, dijo.
El vocero del grupo parlamentario del PRD, Emanuel Reyes, detalló a su vez que, con la campaña “Que Baje La Gasolina”, su partido pretende recolectar más de 5 millones de firmas para exigir al próximo gobierno federal que cumpla su promesa de reducir el precio de las gasolinas.
Precisó que las firmas serán entregadas en su momento a la Cámara de Diputados y al Senado de la República para exigir la disminución del IEPS durante la discusión del Presupuesto 2019.
Respecto a las reformas a la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal aprobadas por Morena y sus aliados en el Palacio de San Lázaro, Gallardo reafirmó su categórico rechazo a la figura de los “superdelegados” de López Obrador en los estados.
“Creemos que estos superdelegados son para crear gobiernos alternos, dañar la soberanía de los estados y limitar la autonomía de los municipios”, acusó el legislador.
Sostuvo que se trata de una artimaña política a favor de Morena, pues incluso antes de que López Obrador tome posesión, algunos jóvenes con chalecos color guinda visitan domicilios y levantan encuestas para los programas federales.
bgpa