Miles de personas salieron a las calles de Berlín ayer para sumarse a marchas similares realizadas en Italia y Francia de este fin de semana, en protesta contra las medidas implementadas por sus respectivos gobiernos para contener la pandemia del nuevo coronavirus.
En Alemania, pese a una prohibición a las concentraciones, los berlineses salieron a las calles, lo que provocó enfrentamientos con la policía y aproximadamente 500 arrestos.
Las autoridades locales prohibieron varias protestas este fin de semana, incluida una del movimiento Querdenker, con sede en Stuttgart. Sin embargo, los manifestantes desafiaron la prohibición, reuniéndose en la capital alemana.
El Departamento de Policía de Berlín desplegó a más de 2 mil agentes para tratar de dispersar a los manifestantes, pero señaló que aquellos que buscaron redirigir o dispersar a los grupos más grandes fueron “acosados y atacados” por los mismos.
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A medida que las muchedumbres avanzaban desde el vecindario de Charlottenburg y del parque de Tiergarten hacia la Puerta de Brandeburgo, la policía advirtió a través de un altavoz que usarían cañones de agua si los manifestantes no se dispersaban.
El Tribunal Superior Administrativo de Berlín-Brandeburgo confirmó el sábado la prohibición de 17 manifestaciones convocadas para este domingo por movimientos anticovid, integrados mayoritariamente por negacionistas y conspiranoicos, al considerar que no estaba garantizado el respeto a las medidas de higiene y distanciamiento.
Aunque el número de casos de coronavirus en Alemania sigue siendo bajo comparado con sus países vecinos, la variante delta ha impulsado un repunte de infecciones en las últimas semanas.
Alemania reportó ayer 2 mil 97 casos nuevos, un aumento de más de 500 infecciones respecto al domingo pasado.
Contra pase de salud
Las protestas de ayer en Berlín secundan a las realizadas 24 horas antes en París y otras ciudades francesas donde miles de personas marcharon contra un pase especial del coronavirus.
Unos 3 mil elementos de las fuerzas de seguridad fueron desplegados en París en el tercer fin de semana consecutivo de protestas contra el pase que pronto será necesario para entrar a restaurantes y otros sitios.
Ante un alza en contagios, los legisladores franceses aprobaron una ley que requerirá el pase en la mayoría de los sitios desde el 9 de agosto próximo.
También varias ciudades italianas, encabezadas por Milán, fueron escenario este fin de semana de algunas protestas contra el llamado “pase verde”.