La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que Ciudad de México no dejará de ser un santuario, por lo que se continuará dando albergue, alimentos y servicios de salud, entre otras asistencias, a las personas que lleguen a la capital.
“Está en la Constitución, nosotros no podemos cambiar la política de migración pero apoyamos al Presidente de la República”, aseguró.
Al término de la develación de la placa para celebrar el Día de la Libertad de Expresión, a la mandataria capitalina se le cuestionó acerca de los oficiales que fueron enviados a la frontera sur del país; sin embargo, aseguró que apoya las decisiones de Andrés Manuel López Obrador.
Horas más tarde, en Baja California, Sheinbaum hizo un llamado al diálogo y al no enfrentamiento ya que, añadió, tanto Ciudad de México como las urbes del norte de Estados Unidos y Canadá viven problemas similares.
“Hoy más que nunca reivindicamos nuestra soberanía, pero también nuestro hermanamiento, apelando al diálogo y no al enfrentamiento, pero también estamos firmes al lado de nuestro presidente, defendiendo siempre los intereses sinceros de nuestra patria y hermanados con los pueblos de las ciudades del norte de nuestro continente.
En ciudades de norte del continente, ya sea de Estados Unidos, de Canadá y de México, “vivimos cerca de 400 millones de personas y enfrentamos retos similares, aunque con nuestras propias características”, manifestó la funcionaria.