Tamaulipecos registran más armas de fuego

Se incrementan al doble los trámites ante la Sedena por parte de ciudadanos para tener una pistola de manera legal, con el fin de protegerse de la inseguridad.

Crece el interés por tramitar permisos de estos artículos (Luis Tapia)
Cristina Gómez
Tampico /

Tamaulipas incrementó en más del doble el número de armas que por diversos motivos fueron registradas ante la Secretaría de la Defensa Nacional en el primer semestre de 2019, lo que expertos atribuyen en parte a que más ciudadanos buscan la manera legal de tener una pistola en casa para protegerse de la inseguridad.

Y es que de acuerdo con la información pública de la institución militar, al segundo trimestre de ese año se habían inscrito 1,443 armas, en tanto que al mismo periodo de 2018  apenas sumaban 626.

El registro de armas en la entidad muestra una tendencia a la alza, ya que en enero, febrero y marzo del año pasado se tenían 489; sin embargo en abril, mayo y junio se reportaron 954.

Ese trimestre es la última actualización que presenta la Sedena en sus datos abiertos, en donde también se observa que es el noveno estado con mayor registro de armas “por diversos motivos”, aunque no desglosa cuáles.

Encabeza la lista la Ciudad de México con 10 mil 054; seguida por Michoacán con 2,571; Jalisco 1,963; Oaxaca 1,432; Nuevo León 1,301; Veracruz 1,259; Guerrero 1,007; Estado de México, 989 y Tamaulipas 954.

De acuerdo con especialistas, el aumento en la “cantidad de armas registradas por diferentes motivos” en el estado, puede deberse a que más gente se está armando para defenderse de la violencia, sin embargo destacan que es positivo que se haga legalmente.

Efraín Alanís Martínez, presidente del Club de Tiro Tampico, sostuvo que vendría de dos vías, la primera es el mecanismo que se está siguiendo por parte de la ciudadanía para tener un arma al interior de los hogares y con ello cuidarse de la delincuencia y la otra es que aumentó la práctica del deporte de cacería, pues ahora hay más facilidades. 

José Manuel Argüello Rey, directivo del Club Cinegético de Tamaulipas, expuso que el aumento en el registro de armas no es un dato negativo, ya que refleja una mayor confianza de la sociedad civil en hacer el trámite de manera legal y con ello se evita el contrabando.

Ambos señalaron que la propia Sedena vende armas a la ciudadanía para defensa personal, siempre y cuando se cumpla una serie de requisitos, con lo que se impone un control y se contribuye a evitar el mercado negro.

“La gente puede tener armas en casa como medida de protección, pero lo más importante es saberlas manejar y que estén en un lugar adecuado y bajo llave”, apuntó Alanís Martínez, quien se mostró consternado por la tragedia en la que un niño de once años se suicidó después de matar a su maestra y herir a otro profesor y alumnos.

“Mi pregunta es cómo llegaron esas armas a las manos del niño, en nuestro club fomentamos que se guarden en un lugar seguro”, destacó.
Mencionó que el hampa está desatada y la ciudadanía busca una seguridad que la policía no le puede dar, además de que no puede haber un elemento en cada casa.

Se falla en educación: AC

El presidente de la Federación Internacional de Ciudades de Valores A.C., Manuel Cruz del Ángel, señaló que no se está aplicando el artículo tercero constitucional, que en esencia dice que la educación que se brinde deberá tender a desarrollar armónicamente todas las facultades del ser humano.

Precisó que dicho precepto, se refiere a que se le deberá enseñar al niño a pensar, razonar, sentir y actuar de manera correcta, lo cual, dijo, no hizo el menor que asesinó a su maestra y luego se suicidó en Torreón Coahuila.

Considera que en esa tragedia, todos somos culpables. “El niño no tenía satisfechas sus necesidades, algo le hacía falta. El problema de la mayoría de la gente es que no le encuentra sentido a su vida”.

Explicó que su asociación tiene una metodología educativa centrada en valores, y se basa en que los niños aprendan a escuchar a los demás y a sí mismos, y que puedan pensar, razonar, sentir y actuar de forma  correcta. 

Expresó que también se les enseña a soñar, porque eso les da sentido a su vida, lo cual, añadió, muy probablemente carecía el menor del colegio Cervantes.


“¿Porqué suceden estas cosas?, porque no tienen sueños bien definidos, es algo que ni los padres ni los maestros les enseñan, y es el primer valor que se debe fomentar”.

Un segundo valor, agregó, es que aprendan a tener una identidad propia, situación de la que también se adolece, según los resultados de cinco mil encuestas que la A.C. ha aplicado para preguntar a infantes ¿quién eres?, ¿cuál es tu misión?, ¿cuáles son tus propósitos a corto y mediano plazo?

“El valor de la identidad es la base de todo, y también se les dice que para lograr sus sueños y sus metas es necesario usar una escalera con dos columnas, productividad y competitividad”.

GINS




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