El accidente del jueves en el que murieron 55 migrantes dejó al descubierto múltiples peligros y el modus operandi de un negocio que cobra 60 mil pesos a cada persona que cruza a México y hasta 150 mil para llegar a Estados Unidos.
En Veracruz, la iniciativa privada informó a MILENIO que la mayoría de los tráileres en que mueven a los indocumentados son robados y los rótulos clonados, además de que se indaga a Zeta Transportes, empresa propietaria de la caja donde viajaban los extranjeros.
Como parte de las investigaciones, la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) está tras la red de traficantes de personas que usan camiones de carga para transportarlos, principalmente por la ruta que inicia en Chiapas y pasa por Veracruz, Puebla y Tamaulipas.
En este último estado, las fuerzas federales y estatales detectaron, en lo que va del año, nueve tráileres que llevaban más de 700 personas con estancia ilegal en el país que se dirigían a la frontera norte; autoridades reconocen que detectan estas unidades hasta que ingresan a casas de seguridad para liberar a los migrantes.
De acuerdo con el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía, hasta ahora se tienen abiertas mil 600 carpetas de investigación y una “cantidad considerable” de vinculaciones a proceso, con lo que se ha logrado avanzar en la investigación a la estructura criminal.
“Desde el que pone los tractocamiones, el que pone las cajas, el que tiene las redes de enganchadores o coyotes o polleros, hasta identificar cuestiones de carácter financiero”, puntualizó. Mejía recapituló hechos en los que se logró ubicar y detener tráileres que transportaban migrantes.
El 3 de diciembre la Guardia Nacional realizó la persecución a un tractocamión con caja refrigeradora en Tecamachalco, Puebla. El vehículo volvo con placas 20AN3F, acoplado a la caja 19UK1K, transportaba a 205 centroamericanos, entre ellos ocho menores de edad.
En esta acción el chofer de la unidad logró escapar, pero se logró la detención y vinculación a proceso de un hombre que, desde otro vehículo, escoltaba al tráiler y que intentó sobornar a los agentes de la Guardia.
Otro hecho ocurrió en el punto de inspección Oyama, ubicado en los límites de Tamaulipas y Nuevo León. Cuando el vehículo de carga fue inspeccionado con rayos gama se detectaron a 634 personas hacinadas.
Por este hecho se tienen abiertas dos carpetas de investigación: una por detención en flagrancia, en la que se vinculó a proceso a cuatro personas, y otra por delincuencia organizada.
Demandan garantías
Empresarios de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) en Veracruz demandaron garantías y aplicación de la ley para evitar tragedias como la ocurrida en Chiapas.
Antonio Exsome Zapata, delegado de la Canacar en Veracruz, señaló que la mayoría de los tráileres que han sido asegurados o abandonados con migrantes son unidades robadas y con rótulos clonados de empresas legalmente establecidas.
“Lo que hemos investigado es que son unidades robadas, pero clonan la identidad de la unidad, consiguen logotipos, le pegan logotipos de empresas normalmente conocidas para que se pierdan entre las unidades que andan circulando.
“Clonan las unidades robadas y les ponen logotipos de empresas que habitualmente hacen ese recorrido, eso también nos deja a nosotros indefensos y que no haya una legalidad”, señaló.
El empresario indicó que la cámara pide garantías porque es un delito transportar indocumentados, pero a veces los mismos migrantes amenazan a los operadores, secuestran las unidades y las manejan ellos.
“Entonces es un tema que nos deja en desventaja como empresario y las garantías que yo pido es que nos auxilien, porque en algunas ocasiones la misma autoridad, con tal de que liberen la vialidad de las carreteras, nos piden que subamos a los migrantes a nuestros remolques
“Aunque sean diez, 15 o 20 kilómetros, no son unidades para transportar personas, sino unidades para transportar carga y esto deja en desventaja y puede pasar lo que sucedió el jueves. No es lo mismo traer carga o peso muerto que una carga dinámica como las personas”, expresó.
Zeta Transportes, compañía a la que pertenece la caja del tráiler que se volcó y causó 55 muertos y 105 heridos en Chiapas, es propiedad de Mauricio Muguira Marenco, empresario cordobés que transporta mercancías diversas, entre ellas café de sus fincas en Chiapas hacia el sureste del país y a Guatemala.
La firma también mueve carga para Walmart, ésta llega a la frontera con Guatemala, pasan la caja a otro tractocamión y regresa vacío, por lo que no descartan que el chofer aprovecha para hacer negocio.
Luto en El Refugio
Flores, veladoras y cruces tapizaron el pavimento del kilómetro 6 de la carretera Tuxtla Gutiérrez-Chapa de Corzo, donde horas antes tendieron los cuerpos de medio centenar de migrantes que pagarían 150 mil pesos para llegar a la frontera norte.
La colonia El Refugio enlutó, al igual que Guatemala, pues 98 por ciento de las víctimas eran de ese país centroamericano. Miguel Yáñez, de 27 años, es uno de los sobrevivientes que salió de la frontera sur y pagaría al llegar a un hotel en la frontera norte.
“En 150 mil pesos, en cuanto llegues al hotel se paga completo, en camioneta o bus no va pagar, hasta que llegáramos”, contó a MILENIO. Miguel viajaba junto a su cuñado Domingo Raymundo Mateos, pero desconoce si está en algún hospital o si murió.
El canciller de Guatemala, Pedro Brolo, viajó a Tuxtla Gutiérrez para visitar a víctimas de la volcadura y reunirse con autoridades mexicanas. A su salida del hospital dijo que buscaría una estrategia regional para enfrentar el tema migratorio.
La Fiscalía General de la República (FGR) confirmó que la causa principal de la volcadura del tráiler fue el exceso de velocidad y que el conductor se dio a la fuga “instantes” después del choque.
“El tractocamión está registrado a nombre de Autotransportes Río Blanco en Chiapas y la caja, a nombre de Z Transportes S A, de Veracruz”, detalló.
Con información de: Julio Navarro, Isabel Zamudio y Anahy Meza.
ROA