Los maestros de la sección XIII se colocaron sobre la calle Moneda, para exigir ser atendidos por el gobierno federal.

José Manuel Venancio, coordinador de gestoría Social y Laboral de la Ceteg, señaló que por lo menos a 150 docentes podrían perder su empleo, pues la Secretaría de Educación Guerrero ya no está renovando sus contratos.

Más de 350 docentes cerraron el principal acceso al puerto, así como una estación del Acabús dejando varados a cientos de vehículos y usuarios.

La Policía Estatal detuvo a 10 estudiantes, quienes primero se identificaron como normalistas de Ayotzinapa, pero no pudieron acreditarlo; el autobús en el que se trasladaban fue asegurado, así como 30 cartones y 20 charolas de cerveza.

Los maestros exigían que les devolvieran 22 plazas; la Secretaría de Educación de Guerrero se comprometió a devolver 12.

Los manifestantes colocaron su campamento en la calle República de Brasil, frente al recinto, para exigir mejoras laborales en los pueblos originarios.

Desde las 09:00 horas, el grupo llegó a la caseta y desplazaron al personal de Caminos y Puentes Federales para cobrar los peajes.

Con cartulinas los padres de familia inconformes exigen la reposición de 20 maestros y la entrega de libros de texto para escuelas del nivel básico.

El gobernador dijo que a pesar de recientes en Chiplacingo y retenciones de empleados en algunas oficinas, se han entregado plazas directamente.

El gobernador dio la indicación a los funcionarios de la Secretaría de Educación Guerrero que eviten reunirse con integrantes de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación.