La subsidiaria de Gruma entregó casa por casa el equivalente a mil 200 toneladas de tortillas.

El INIFAP buscará alianzas con empresas como Grupo Maseca y Bimbo, además de la creación de un fondo al que aporten dinero tanto la iniciativa privada como el Estado, para financiar proyectos en favor del campo mexicano.

La nutrióloga Araceli Martínez Coronado destacó que con este tipo de harinas se pueden elaborar diversos platillos que ayuden al cuidado de la salud familiar con un alto valor nutrimental.

Maseca demostró que no ha subido sus precios, ni tiene intención de hacerlo. Además adquirió toneladas de maíz en distintos estados de la república para garantizar los insumos suficientes en la producción durante la pandemia.

La dueña de Maseca se comprometió a no aumentar el precio de sus productos.

Araceli Martínez Coronado, nutrióloga certificada por el Colegio Mexicano de Nutriólogos, afirmó que la tortilla de maíz es uno de los mejores aliados para que las personas alcancen la ingesta diaria recomendada de nutrientes.

El organismo informó que emitió 20 apercibimientos y requerimientos de información a empresas clave en la cadena de producción y distribución de productos e insumos básicos.

Gruma aseguró que cuenta con la capacidad productiva para no elevar los precios de sus productos finales por la menor oferta del grano.

Lorenzo Mejía, dirigente de la Unión Nacional de Industriales de Molinos y Tortillas, aseguró que empresas como Maseca incrementarán los precios de sus insumos y por ende subirán los precios de la tortilla industrializada.

La tortilla y derivados del maíz forman parte esencial de la gastronomía mexicana, pero poco a poco han ido conquistando los mercados internacionales a través de diferentes marcas.