El ministro del Interior de Italia, Matteo Salvini, cedió hoy al autorizar el desembarco de 27 menores del barco de la organización Open Arms, varado frente al puerto de Lampedusa con 134 migrantes, y cuya tripulación declaró “estado de necesidad”, ya que “no puede garantizar más la seguridad a bordo”.
Sin embargo, Salvini reiteró, que aunque se llevará a cabo el desembarco en contra de su voluntad, la línea de su ministerio no cambia y mantiene su política de “puertos cerrados a la migración ilegal”, reportó la agencia de noticias Ansa.
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Por lo tanto, indicó que el desembarco de lo que llamó “presuntos menores", se realizará "bajo la exclusiva responsabilidad del primer ministro" de Italia, Giuseppe Conte, quien envió dos misivas a Salvini reiterando la necesidad de autorizar al Open Arms atracar en Lampedusa, con sus 134 migrantes que permanecen en la nave desde el 1 de agosto pasado.
El ministro del Interior trasladó toda la responsabilidad a Conte en una carta en la que señaló que “muy a su pesar” y en la medida de su responsabilidad y como un ejemplo de colaboración, “daré las disposiciones para que no haya obstáculos para la ejecución de tu exclusiva determinación”, para el desembarco de los “presuntos menores".
Conte, por su parte, reiteró la disposición de la Comisión Europea para gestionar entre los países miembros de la Unión Europea que acojan a los migrantes varados en el Mediterráneo.
Aseguró que Francia, Alemania, Luxemburgo, Portugal, Rumania y España están dispuestos a acoger a las migrantes del Open Arms.
La policía italiana ya está en el muelle del puerto de Lampedusa iniciando las operaciones de desembarco de los menores, que en su mayoría viajan solos, desde el barco Open Arms, que este sábado se declaró en “estado de necesidad”, luego de más de dos semanas sin poder desembarcar a los migrantes.
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La organización afirmó a través de un comunicado que se encuentra "en situación de necesidad y no puede garantizar la seguridad de las personas que se encuentran a bordo".
Mientras, el flujo migratorio no se detiene, ya que en el Mediterráneo, cerca de aguas territoriales italianas se encuentra el barco Ocean Viking con 365 persona a bordo, 103 de ellos son menores. La tripulación también está en espera de que le autorice un puerto seguro para desembarcar.
jos