Sobrellevar la pandemia de covid-19 no ha sido fácil, sobre todo para aquellos emprendedores que han tocado hasta la última puerta para obtener apoyo y sacar a flote su negocio.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la crisis económica provocada por la pandemia afectó principalmente a las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), dejando hasta el tercer trimestre del año un saldo de un millón negocios cerrados y pérdidas por 500 mil millones de pesos.
Ante esta situación, distintas instituciones financieras implementaron en apoyo a los emprendedores distintos esquemas de financiamiento con el fin de ayudarlos a mejorar su situación.
A pesar de las dificultades, si fuiste de los afortunados en recibir un crédito para tu empresa, estos son algunos consejos que te ayudarán a administrarlo de la mejor manera posible, obteniendo beneficios y resultados favorables para tu emprendimiento.
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Define un objetivo
Una vez que tenemos cierta cantidad de dinero disponible es muy fácil caer en tentaciones y empezar a utilizarlo para el día a día, y debes evitarlo a toda costa. Destina este dinero a un fin específico y no lo uses para ninguna otra cosa; por ejemplo: la compra de equipo nuevo, realizar una ampliación, renovar tu inventario, etc.
Lo ideal es que desde antes de recibir el crédito tengas ya un plan y un presupuesto para el proyecto al cual se destinará este capital; de esta forma ni un centavo será desperdiciado.
No lo gastes, invierte
Lo ideal será invertir este capital fresco en algún activo o proyecto que te permita crecer tus servicios, aumentar tus precios o atender un mercado más grande, de esta manera ese dinero se multiplicará.
Puedes renovar una máquina que ahorra tiempo y produce el doble; ampliar tu red de repartidores para vender durante más días o en diferentes horarios; expandir tu portafolio de productos, o levantar tu página web para registrar mayores ventas, si es una inversión al final se traducirá en mayores ganancias.
Utilízalo para ahorrar
Con el capital suficiente puedes buscar descuentos con proveedores por pagos en una sola exhibición o mejores precios al comprar insumos y materia prima al mayoreo. De esta manera no sólo inviertes en algo que vas a convertir en más dinero sino que además ahorrarás en el camino.
Capacita a tus empleados
La fuerza de trabajo es fundamental para muchos pequeños negocios, la eficiencia de tus colaboradores es clave para cumplir tus objetivos. Invertir en ellos y capacitarlos por ejemplo en el uso de una nueva maquinaria, un nuevo proceso o para hacer de manera más eficiente y rápida sus tareas, más que un gasto será una inversión para mejorar tu productividad. Además este es un valor agregado que los incentiva, motiva y previene la fuga de talento.
Invierte en tecnología
Si bien la pandemia nos cerró algunas posibilidades, la digitalización ha ayudado a muchas empresas a abrirse a otros mercados, llegar a más audiencias o eficientar mejor sus procesos.
Puedes invertir en implementar tu tienda de e-commerce, y así continuar atendiendo tu mercado o quizá puedes invertir en publicidad en redes sociales que haga que más gente te conozca, o incluso digitalizar procesos para agilizar tus servicios.
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