ArcelorMittal recortó su perspectiva para la demanda global de acero, ya que el estancamiento de las ventas de automóviles en Estados Unidos y Europa golpeó al mayor productor del mundo de la aleación.
El grupo con sede en Luxemburgo proyecta que la demanda europea se va a contraer 3 por ciento en 2019 en comparación con las estimaciones anteriores de solamente 1 por ciento en medio de la industria automotriz que se encuentra en dificultades, la desaceleración de la demanda de maquinaria y las disputas comerciales en marcha.
“Seguimos enfrentando difíciles condiciones de mercado en el tercer trimestre, caracterizadas por los bajos precios del acero junto con los altos costos de las materias primas”, dijo Lakshmi Mittal, director ejecutivo de ArcelorMittal.
La demanda de acero se deprimió a escala mundial, golpeada por el vacilante crecimiento económico debido a la guerra comercial entre Estados Unidos y China, que afecta a los fabricantes de automóviles y sus largas cadenas de suministro. El FMI cree que el sector que se contrae representó una cuarta parte de la desaceleración económica mundial del año pasado.
El grupo también reiteró sus intenciones de devolver el control de la planta siderúrgica de Ilva, que maneja números rojos y es la más grande de Europa, que emplea a 8 mil personas, al gobierno italiano dentro de los primeros 30 días tras terminar la inmunidad penal por infracciones ambientales.
Myles Allsop, analista de investigación del sector de minería de UBS, dijo: “¿Es esto un juego de la gallina o se van a alejar? Si se alejan de él, mejorarán las ganancias y el flujo de efectivo en 2020”. Algunos piensan que el grupo no seguirá adelante con la decisión de devolver el control de la planta italiana, si el gobierno de coalición del país reintroduce la protección de inmunidad legal.
ArcelorMittal reportó ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización de mil 100 mdd en los tres meses hasta septiembre, 32 por ciento por debajo del trimestre anterior, aunque superó las expectativas de los analistas.
“Aún así fue un trimestre muy débil”, dijo Allsop. “La debilidad llega principalmente de Europa y Norteamérica, que es el centro principal de ArcelorMittal”.
El grupo registró una pérdida neta por segundo trimestre consecutivo, lo que pone de relieve el impacto nocivo de la guerra comercial que desaceleró las ventas de automóviles en China, las cuales cayeron el año pasado por primera vez en casi tres décadas.
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CIFRAS QUE AUGURAN TIEMPOS OSCUROS
En el tercer trimestre, el grupo de metal y minería despachó 20.2 millones de toneladas de acero, 7.3 por ciento por debajo de los envíos en el trimestre anterior.
Los precios del mineral de hierro, un ingrediente clave en la fabricación de acero, alcanzaron un máximo de cinco años de 126 dólares por tonelada en julio después de que se produjeron conmociones en el suministro en Brasil, donde se derrumbó una mina propiedad de Vale, el mayor productor mundial de materias primas.
El precio de las acciones de ArcelorMittal subió 6 por ciento la mañana del jueves para llegar a 15.40 euros. Las acciones del grupo que cotiza en Ámsterdam han perdido un quinto de su valor desde enero.