La administración Trump endureció los controles de exportación dirigidos a Huawei y sus proveedores en la industria mundial de semiconductores, lo que se suma a las tensiones entre Washington y Pekín que se intensificaron durante la pandemia.
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En un comunicado el viernes, el Departamento de Comercio dijo que Huawei, la compañía china de equipos de telecomunicaciones considerada un riesgo para la seguridad nacional de EU, y HiSilicon, una filial, siguieron utilizando tecnología estadunidense en su diseño de semiconductores a pesar de estar sujeta a controles de exportación desde mayo de 2019.
Denunció que Huawei estaba “encargando su producción en fundiciones en el extranjero utilizando equipos estadunidenses”, lo que socava los objetivos de seguridad nacional y política exterior de Estados Unidos.
“Así no es como se comporta un ciudadano corporativo global responsable”, dijo Wilbur Ross, el secretario de comercio de EU.
“Debemos enmendar nuestras reglas (que fueron) explotadas por Huawei y HiSilicon e impedir que las tecnologías estadunidenses permitan actividades malignas contrarias a los intereses de seguridad nacional y política exterior de EU”, dijo Ross.
El Departamento de Comercio dijo que las restricciones van a afectar los diseños de semiconductores y los conjuntos de chips, incluyendo los que se producen en plantas extranjeras que utilizan “equipos estadunidenses”.
La medida obtuvo la fuerte aprobación de un miembro del Partido Republicano que tiene una línea dura con China, Ben Sasse, el senador por Nebraska. “Estados Unidos necesita estrangular a Huawei. Las guerras modernas se libran con semiconductores, y permitimos que Huawei utilice nuestros diseños estadunidenses”, dijo. “Esto es bastante simple: las compañías de chips que dependen de la tecnología estadunidense no pueden meterse a la cama con el Partido Comunista Chino. Esta regla está pendiente desde hace mucho tiempo”.
La acción de la administración Trump se produce cuando el presidente y los funcionarios estadunidenses adoptan una postura de mayor confrontación con China, culpando a Beijing de ocultar información sobre la propagación del coronavirus en todo el mundo.
Donald Trump amenazó esta semana con “cortar toda la relación” con China en medio de la pandemia, incluyendo un posible movimiento para deshacer la tregua comercial que se alcanzó con mucho trabajo en enero de este año.
La administración Trump ya tomó medidas para impedir que un fondo de pensiones federal invierta en ciertas acciones chinas.
EN CIFRAS
12,000 millones de dólares será la inversión para una planta en Arizona de la empresa Taiwan Semiconductor Manufacturing, el fabricante de chips por contrato más grande del mundo.
1,600 empleos serán creados por TSMC en la planta que producirá por mes 20 mil obleas, una fina rebanada de silicio que se utiliza para fabricar productos como circuitos cerrados.