La sequía en México disminuyó producción de maíz y otros granos, por lo que se incrementaron importaciones para cubrir la demanda nacional; esto, a su vez, aumentó precios para consumidores y productores de carne que usan granos para alimentar animales, causando un riesgo a la seguridad alimentaria.
Juan Carlos Anaya, director general del Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA), explicó a MILENIO que la sequía cubre casi 70 por ciento del territorio nacional y afecta principalmente al noreste y Bajío, influyendo en subida de importaciones, sobre todo de maíz y frijol.
Seguridad alimentaria, en riesgo
Resaltó que “viene lo peor”: prevé que por la sequía se reduzca la producción de primavera-verano 2023 (P-V), y si no llueve, se alcanzarán importaciones récord en este año y en 2024, pues la falta de lluvia puede ser mayor, impactando en ingresos de productores, quienes al no tener un seguro enfrentarán daños “catastróficos”.
En las principales zonas productoras de frijol, la sequía provocó daños en la superficie sembrada al final del ciclo P-V 2023, provocando 35 por ciento menos de las casi 424 mil toneladas estimadas; con esto será la segunda cosecha más baja en 30 años y el índice de seguridad alimentaria será de 88.2 por ciento, “ya no seremos autosuficientes”, explicó el GCMA en su reporte sobre los daños de la sequía.
En el caso del maíz, destacó que la producción nacional puede caer de 27.8 millones de toneladas a 23.1 millones, siendo una baja nacional de 17 por ciento; esto, en el peor de los escenarios, y el más alentador de ellos, es tener una producción de 25.6 millones, que es 8 por ciento menor.
Las importaciones estimadas para este año son de 23.4 millones de toneladas, y esto superará en 1 por ciento a la propia producción nacional, disminuyendo así su indice de autosuficiencia de 61.5 por ciento a 49.8 por ciento.
“La posición de México ante el mundo cambiaría notablemente. Aunque no seríamos desplazados del séptimo puesto como productor de maíz, la participación estará por debajo de 2.3 por ciento. En cuanto a las importaciones, si éstas alcanzan las 23.4 millones de toneladas mensuales (TM), nuestro país se convertiría en el principal importador, superando a China (23 millones de TM)”.
Encarecimiento
Esta situación afecta a los productores de carne, pues más de 60 por ciento de sus costos de producción es para la alimentación de animales como lechones y pollos.
Según datos del Consejo Mexicano de la Carne, de enero a septiembre, conseguir el maíz de grano ha tenido un sobrecosto de 23 por ciento; de alfalfa, 15.2, y pasto forrajero hasta 12 por ciento.
En entrevista con MILENIO, el presidente de la Alianza Nacional de Pequeños Comercios (Anpec), Cuauhtémoc Rivera, afirmó que en el caso del maíz, desde primavera hay aumentos en los productos derivados del grano.
“Llevamos de marzo para acá con una temperatura muy alta en el país y se estima que se va a cerrar el año con muy poca lluvia, lo que afecta más es la sequía; empieza el asunto desde el elote, pero también hemos reportado aumentos en las tostadas, tortillas y totopos. Los elotes han subido un promedio de 20 a 26 por ciento; los tamales, 40 por ciento; el maíz de grano, 30 por ciento, y las tortillas 20 por ciento de septiembre a septiembre”.
EDD