Jorge F. Hernández
  • Escritor, académico e historiador, ganó el Premio Nacional de Cuento Efrén Hernández por Noche de ronda, y quedó finalista del Premio Alfaguara de Novela con La emperatriz de Lavapiés. Es autor también de Réquiem para un ángel, Un montón de piedras, Un bosque flotante y Cochabamba. Publica los jueves cada 15 días su columna Agua de azar.
  • Sesenta y Uno

    Hoy llego a la edad que tenía mi abuelo Pedro Félix cuando yo nací.
  • Gafas de Gordon

    Entre las muchas páginas, infinidad de párrafos e inolvidables paseos que debo a la generosidad de Pepe Gordon, soy un reconfirmado fan de las series llamadas Imaginantes
  • Abrazo a Auster

    Tenía que huir del ruido banal y el enredo infinito. La zarzuela española cobraba de pronto una nueva intensidad al paso de las horas
  • Nuevo silabario

    Defensores de demencia desatada deberían declinar o desistir del delirio.
  • Burro redomado

    El asno ha vuelto a rebuznar. Empoderado por el afán impune del desdén del Patrón ante cualquier viso de legalidad
  • El aire es fuego

    Mi amigo Pepe Cerezo exclamó: “El aire es fuego” en medio de una sobremesa que recurrió a la terraza en busca de brisa
  • Desbrújula

    Con todo respeto someto a consideración de la Real Academia de la Lengua la consideración debatible de la palabra desbrújula como nueva referencia de acentuación o por lo menos, definición en su vasto catálogo.
  • Cómo te veo

    De frente, se ven sin ojos. No necesitan verse de veras para mirarse como quien se detiene frente a un espejo.
  • Un elefante en Silao

    Una lejana tía abuela sufrió un célebre soponcio en el patio trasero de su casita solariega allá en Silao, Guanajuato.