Los sicarios de José Antonio Yépez Ortiz El Marro comenzaron a delatar sus prácticas más oscuras, su modo de operar en Guanajuato, sus puntos de venta y los distribuidores que estaban en su nómina.
Uno de sus ex colaboradores, lo traicionó cuando fue capturado y se alió con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) para revelarles los puntos de distribución de droga y combustible robado. Otros tres, delataron a las autoridades que en los últimos años les ordenó crear fosas clandestinas, y dieron los puntos exactos donde recientemente encontraron decenas de cadáveres.
Ahora, las autoridades de Guanajuato y las fuerzas armadas realizan operativos para detectar fosas clandestinas del Cártel de Santa Rosa de Lima, pero también del CJNG como resultado de la disputa por el territorio en los últimos años.
Funcionarios del gabinete estatal de seguridad explicaron a MILENIO que tras estas declaraciones, siguen la pista de decenas de cadáveres que se habrían enterrado principalmente en el llamado “Triángulo de las Bermudas” que conforman los municipios de Villagrán, Juventino Rosas y Celaya, la zona que El Marro controlaba, además de Salvatierra y Cortazar, otros de sus bastiones. Sin embargo, debido a que su poderío se extendió hasta a 26 municipios, las autoridades no descartan que haya caído en esta práctica en otros puntos del estado.
Fueron tres sicarios de El Marro quienes delataron que el líder del Cártel de Santa Rosa de Lima les ordenó crear fosas clandestinas para enterrar a sus víctimas y rivales. Ahora, cuando catean un domicilio o predio vinculado con el Cártel de Santa Rosa de Lima buscan indicios de irregularidades en la tierra.
Luis, José y Javier fueron detenidos el 30 de octubre y vinculados a proceso el 3 de noviembre por los delitos de tentativa de homicidio en agravio de servidores públicos, contra la salud y portación de armas de fuego. En sus declaraciones revelaron la ubicación exacta de la fosa de Caracheo en Cortazar en la que ellos mismos habrían ido a abandonar cuerpos.
Encontraron más de 60 cuerpos que de acuerdo a lo que detallaron las autoridades a MILENIO, algunos tendrían hasta dos años enterrados.
“La identificación no es nada fácil, lleva mucho tiempo porque además, en la fosa los cuerpos están amontonados y cuando se descomponen quedan huesos sobre huesos, hay que analizarlos todos y determinar de qué cuerpo son, luego ir armándolos y sacar el perfil de ADN para poder compararlos con los perfiles de los desaparecidos”, explicaron mientras continúan las labores en la Fiscalía General del Estado de Guanajuato.
Operador reveló al CJNG puntos de operación
Los principales asesinatos en comercios de Salamanca y Celaya se desataron tras las revelaciones que José Alfredo, El Yeyo hizo al Cártel Jalisco Nueva Generación cuando decidió abandonar al Cártel de Santa Rosa de Lima.
Autoridades estatales explicaron a MILENIO de acuerdo a las labores de inteligencia, El Yeyo era uno de los principales operadores de José Antonio Yépez Ortiz pero tras su captura se alió con el CJNG como informante, y le dieron refugio en Veracruz.
“El Yeyo ventiló las zonas de operación y las tienditas locales que funcionaban como vendedoras de droga y del combustible robado del Cártel de Santa Rosa, comerciantes que fueron asesinados por el CJNG, extorsionados o amenazados para que ahora trabajen para ellos.
El pasado 3 de noviembre, en un operativo coordinado por la Secretaría de Marina, José Alfredo fue capturado en Veracruz y trasladado a Guanajuato donde tiene órdenes de aprehensión por homicidio.
ledz