El 19 de diciembre de 1967, en el Hospital Civil de Ciudad Victoria, llegó a este mundo Mónica Zacil Villarreal Anaya bajo el signo de Sagitario, la más consentida de la familia por ser la menor de cuatro mujeres y un hombre, del joven matrimonio entre Américo Villarreal Guerra y Paula Beatriz Anaya Guerrero, quienes unieron sus vidas el 23 de marzo de 1957.
La hoy candidata a la alcaldía de Tampico por la coalición entre Morena, PT y Verde tomó el gusto por la política del patriarca de la familia y ex gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Guerra, egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) como ingeniero civil en 1955.
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Posteriormente, el papá de Mónica se especializó en temas hidráulicos y recuerda que en cada foro del agua le reconocen como uno de los mejores.
La matriarca de la casa, la señora Paula Beatriz, se inclinó por la docencia y cursó sus estudios en la Escuela Normal Superior de Ciudad Victoria, que posteriormente desempeñó en la capital tamaulipeca y Matamoros; después, con los hijos, se tuvo que dedicar al hogar.
Inclusive, cuando su esposa estaba embarazada, el ingeniero Américo estaba trabajando en Yucatán, en una presa y desde allá se trajo la inspiración para el segundo nombre de Zacil, el segundo nombre de la candidata, que en maya significa “iluminación”.
Carrera en tres estados
Mónica aseguró que si algo se “arrepiente” es de no elegir la carrera de Economía; sin embargo, se inclinó por la Licenciatura en Administración de Empresas, la cual comenzó a cursar en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey (Itesm) campus Ciudad de México a finales de los ochentas.
Comenzó en la capital del país sus estudios porque su padre fue senador de la República por el PRI de 1982 a 1986, así que todos trataban de estar cerca en familia; sin embargo, solamente hizo un semestre en dicho campus porque las aspiraciones de su padre ya estaban centradas en la gubernatura, así que se cambió al Itesm de Monterrey.
Pero no fue la única mudanza que tuvo para poder concluir con sus estudios, la joven Mónica Villarreal se titularía como licenciada en Administración de Empresas entre 1990 y 1991, pero en el Tec de Monterrey Campus Tampico, en el cual logró cursar su último semestre de la carrera.
Matrimonio e hijos
El motivo por el cual llegó hasta Tampico fue porque contrajo matrimonio a los 21 años de edad antes de concluir sus estudios universitarios y posteriormente vinieron sus hijos, ya con el título en mano. Se llaman Mario Andrés de Jesús, Manuel Alberto y Ana Beatriz, del mayor al menor.
El más grande nació en 1991 y es médico de profesión, tiene una especialidad en Medicina Interna, está haciendo una subespecialidad en Cardiología y quiere seguir estudiando a un alta especialidad. Manuel es abogado y tiene dos maestrías, una en Administración Pública y Finanzas, está trabajando en la delegación de Profeco.
La más chica de los tres hermanos es Ana Beatriz, es psicóloga clínica y es quien le ha dado la oportunidad a su madre de convertirse en abuelita de dos nietos: Danielito de tres años y Bea, una niña de 11 meses.
¿Cuál fue su primer trabajo?
Entre los 70s y 80s, Américo Villarreal Guerra fue funcionario federal en la Secretaría de Agricultura y Recursos Hidráulicos, así como las variaciones de dicha dependencia con el paso de los años. La candidata a la alcaldía de Tampico recordó que su primer trabajo fue vender tarjetas de Navidad.
Mientras su papá estaba en Recursos Hidráulicos, que tenía como sede un edificio de la calle Reforma, en la capital mexicana, logró conseguir postales con el responsable de una imprenta, quien le daba la mitad de cada venta que hacía, es decir, si vendía una tarjeta de $5, ella recibía $2.5.
Aprovechó que su papá trabajaba en dicho edificio y recorría todas las oficinas que podía para vender las tarjetas navideñas, acompañada por una secretaria que trabajaba en la oficina de su papá.
Aunque no recuerda lo que ganó, sí tiene presente que todo ese dinero fue a dar a una cuenta de banco que sus papás tenían para que pusiera sus ahorros, los cuales logró por recorrer aquel edificio que años más tarde se desplomó a causa del terremoto que devastó en septiembre 1985 a la Ciudad de México.
El otro empleo que recordó la aspirante a gobernar Tampico, fue como responsable de una agencia de viajes que, junto con su esposo, a principios de los noventas, decidieron hacer. Eran los responsables de organizar tours por sitios de esparcimiento a nivel regional y nacional, pero cuando fue mamá, ya no pudo continuar.
¿Cómo ingresó a la política?
Era una adolescente, una jovencita, a principios de los años 80s y considera que fue su primer acercamiento con la política cuando acompañaba al ingeniero Américo a hacer campaña para su primera experiencia como candidato por un puesto de elección popular, al Senado de la República por el PRI.
Recuerda que acompañaba, estaba con el bandereo y en los recorridos cuando las campañas duraban seis meses, pasó lo mismo con la candidatura a la gubernatura de Tamaulipas, en la cual aprovechaban los días libres y puentes para acompañar en el proselitismo a su padre.
Mónica ha logrado participar en procesos electorales priistas en Tampico desde hace más de 20 años y ha ocupado cargos como jefa de la Oficina Fiscal de Tampico, titular del Registro Civil, subdirectora de Catastro, directora de Atención a la Mujer en uno de los dos trienios de Magda Peraza Guerra.
Es actual regidora con licencia en Tampico por Morena, comisionada de Parques y Jardines, y en las pasadas elecciones a la gubernatura, fue la responsable de 10 municipios del sur del estado y pudo obtener buenos resultado.
EAS