La compañía de juguetes pretende reducir gradualmente el contenido de petróleo en sus ladrillos pagando hasta 70% más por la resina renovable certificada.

Los investigadores experimentaron con bacterias y han obtenido resultados favorables en biodegradabilidad.

En su lugar se apuesta por la celulosa para las mallas o el cartón para ayudar al medio ambiente y reducir las emisiones de CO2.

Algunos de sus productos se pueden disolver en el agua y otros pueden convertirse en composta, reduciendo la contaminación al medio ambiente.

Se trata del proyecto Cactolli, creado por alumnos del Conalep de Ciudad Victoria quienes con la baba de esas plantas crean un material que sirve para fabricar popotes, cubiertos y platos.

Tras una campaña de concientización, entrará en vigor el uso de material biodegradable, se establecerán multas o hasta clausura de negocios a quien no lo utilice.

Alternativa. La asociación de recicladores espera duplicar la producción, al pasar de las 30 mil a 60 mil unidades.

A partir de hoy 26 de enero entraron en vigor las sanciones por el uso de popotes de plástico en bares, restaurantes y cafeterías.

Los fabricantes de bolsas de plásticos se reunirán la próxima semana de nuevo con la dependencia y deberán entregar un documento con las propuestas que consideren para sean analizadas.

Los legisladores del PAN consideraron que distribuidores, comerciantes y consumidores no tienen información sobre las multas y las bolsas que puedan adquirir sin infringir la ley.