Los indicios de una saludable demanda de combustible y la preocupación por la oferta podrían reavivar la cotización en los próximos días.

Sin embargo, el aumento de los inventarios de petróleo en Estados Unidos moderó las subidas de los precios.

La inquietud ante la posibilidad de que los recortes de tasas de la Fed se retrasen más de lo previsto ha lastrado las perspectivas de la demanda de petróleo.

Factores favorables a los precios no contrarrestan del todo los datos de la AIE sobre la baja en la demanda de petróleo para 2024.

La semana pasada, los futuros del Brent y el WTI tuvieron ganancias impulsadas por el riesgo creciente de que se agrave el conflicto en Medio Oriente.

La AIE indicó que el crecimiento de la demanda mundial de petróleo estaba perdiendo impulso y recortó su previsión de crecimiento para 2024, que se opone a la opinión de la OPEP.

La cantidad de existencias hizo que los operadores se cuestionaran la demanda, pero se afirma que éstas son consecuencia de los menores índices de utilización de las refinerías.

La OPEP prevé que la demanda mundial de petróleo aumentará considerablemente en 2024 y 2025. Aunque sus expectativas son muy superiores a las de otros pronosticadores.

El conflicto en la Franja de Gaza ha mantenido elevados los precios; mientras los cambios sobre la trayectoria de las tasas de interés en Estados Unidos han limitado las subidas de los mismos.

Por otro lado, empresas energéticas estadunidenses aumentaron el número de plataformas petrolíferas y de gas natural hasta su nivel más alto desde mediados de diciembre.