El virus que se conoce como Coronavirus SARS-CoV-2 y que causa la enfermedad que se denomina Covid-19 es de fácil transmisión. A partir de pruebas y análisis realizados por el Centro de Detección Biomolecular de la Universidad Autónoma de Puebla (UAP) se detectó que una de cada 12 personas sin síntomas era portadora del virus que causa la enfermedad del covid-19.
Durante encuentro virtual con la comunidad de la Facultad de Administración de la máxima casa de estudios del estado, Lilia Cedillo Ramírez, directora del Centro de Detección Biomolecular de la UAP, explicó que las personas sin síntomas pueden transmitir el virus sin saberlo.
A un año de la pandemia y de que se implementaron medidas como la sana distancia, el uso de cubrebocas y la suspensión de clases presenciales, la investigadora de la máxima casa de estudios explicó que durante los meses de junio de 2020 y en enero de este año, cuando se registró el mayor número de contagios, se detectó que una de cada 12 personas eran portador asintomático.
“Uno nunca se imagina que una persona pueda estar infectada; sin embargo, si puede trasmitirlo a otras personas. En las épocas en las que vimos el mayor número de casos, en junio de 2020 y en enero de 2021, hicimos algunos estudios en portadores y nos dimos cuenta de que las personas seguían sanas y una de cada 12 podía tener el virus”, comentó.
Explicó que, durante el mes de marzo, se registró un porcentaje de portadores menor; sin embargo, tan pronto como surja otro pico de contagios, se podría volver a registrar un escenario muy parecido a lo vivido al inicio de este año.
“Imagínense, ustedes van al tianguis, al mercado, al supermercado, al centro comercial. Por cada 12 personas que vean, una puede estar infectada y esa persona puede transmitir el virus a otra. Así de impresionante fue el comportamiento del virus en los meses de enero”, apuntó.
En su charla virtual, Cedillo Ramírez destacó que, al inicio de la pandemia, un paciente infectado podría transmitir el virus a dos o tres personas más; mientras que las variantes del covid-19 pueden pasarlo a más seres humanos, es decir, el nivel de infección aumentó, aunque el nivel de letalidad se mantiene.
“Vimos que una persona enferma podía transmitir el virus a dos o tres personas; sin embargo, han aparecido variantes más infectivas. Las variantes tienen la misma tasa de letalidad, pero son más efectivas, es decir, una persona que se infecta puede estar contagiando a cinco, siete o nueve personas, dependiendo de la variante”, destacó.
La transmisión después de la curación es posible y el virus puede pasar a otra persona hasta dos semas después a la desaparición de los síntomas; sin embargo, se tienen casos de una mayor permanencia, apuntó Cedillo Ramírez.
“Al inicio de la pandemia, una persona se infectaba y dos semanas después, ya no se tenía el virus y podía regresar a sus actividades cotidianas. Actualmente, hemos visto que el virus permanece más tiempo en una persona y está tardando un mes o un poco más para ser eliminado”, destacó.
Por otra parte, la investigadora destacó que, a pesar de las complicaciones, las investigaciones, en medio de la pandemia, continuaron y reconoció que los sonidos de la pandemia en el momento de dar clases o de hablar con un colega, todo a distancia, son el ladrido del perro, el ruido del camión de gas, la voz del que vende pan.
“Se trata de un proceso difícil para alumnos y maestros porque hay que pensar la manera en que los jóvenes permanezcan atentos. A la mayoría coincide en que les complace no trasladarse y gastar en transporte, además de convivir más con su familia, pero lo que no les agrada es que se distraen con facilidad, subrayó Cedillo Ramírez.
AFM