Comerciantes y locatarios que trabajan dentro de la Central de Abastos de Pachuca se muestran preocupados en su trabajo diario, ya que no cuentan con agua potable ni drenaje para realizar el aseo general con el fin de evitar la propagación del covid-19, tampoco para lavarse las manos, por lo que han optado por utilizar garrafones de agua con dispensadores para llevar a cabo esta acción, indispensable para mantener cierto control de limpieza.
Laura, quien prefiere no dar su nombre completo para evitarse problemas dentro de su área de trabajo, es una de las tantas y tantos trabajadores que deben salir cada media hora para ir al lavabo comunitario que se ubica a la entrada de la estación del Tuzobús Central de Autobuses y lograr el cometido, “pero después no se puede salir a cada rato, porque debemos atender el negocio y pues implica que cruce el pasillo principal y llegue a este punto, luego me regreso y aquí no hay tiempo que perder, siempre hay trabajo”, explica.
Está sobrepasada desde hace décadas
Esta problemática persiste en la Central de Abastos desde años atrás, tras una planeación poco fortuita, “que ha sido sobrepasada desde hace décadas”, indicó David Heras Delgadillo, quien es comerciante dentro de la actual Central de Abastos y el responsable del proyecto de la Central de Abastos Miguel Hidalgo (Ceda_MH) en Zapotlán.
“No es una Central de Abastos, es el mercadote de Pachuca y está rebasado porque no existen las condiciones mínimas para ser una Central de Abastos. No hay agua potable, no hay drenaje, no hay andenes y le he hecho partícipe al secretario de Desarrollo Económico sobre este escenario, el de la pandemia, en el que no se pueden ni lavar las manos y lo que han intentado es resolverlo con poner mucho gel.
“No hay las condiciones porque es una central que se hizo desde hace casi 40 años con 10 bodegas grandes y 20 chicas, de tal suerte que las instalaciones eléctricas y sanitarias fueron para una circunstancia de este tamaño, pero no para las que hay actualmente”, expuso.
Ante ello, reitera la necesidad de que continúe el proyecto de la Ceda_MH, misma que se ha detenido “por cuestiones políticas”, y ante años de espera continúa sin avanzar la obra.
Garantizan servicios
Al ser cuestionado sobre la situación que padecen los cientos de locatarios y comerciantes del lugar, el titular de la Secretaría de Desarrollo Económico del estado, Sergio Vargas Téllez, confirmó que la Central de Abastos no cuenta con la infraestructura necesaria, “y es un tema que hemos revisado, pero no es tan sencillo desde el punto de vista técnico”, y ante la emergencia sanitaria, ha resuelto garantizar los servicios de limpieza para evitar que se convierta en un foco de infección de covid-19.
“En lo que hemos trabajado con el municipio de Pachuca es que siempre habrá agua para cubrir las necesidades de limpieza, como desinfección necesaria para baños aunque no haya un sistema como quisiéramos que existiera de manera sofisticada, pero se garantiza el suministro.
“El segundo tema relevante es el de la basura que también se ha trabajado con el gobierno municipal y ahí es donde nos importa más, para el cual hemos hecho un convenio con el municipio para que, de forma diaria, se recojan los deshechos por lo que la garantía es que siempre haya agua, que se haga la recolección de basura y que realicemos de forma continua, la desinfección con vapores en todo el lugar, que se realiza antes de que abran los comercios”, indicó.
Dentro de la central son pocos los locatarios que cuentan con el vital líquido “porque las tomas son individuales y cada quien tiene que hacer la suya, porque cada uno es corresponsable de pagarla y contratarla”, indicó por su parte, el secretario general de la Central de Abasto, Francisco Rodríguez Pérez.
“Pues usamos mucho gel para evitar la propagación del virus, porque sí vemos difícil que nos coloquen el agua directa a cada una de los locales. Solo esperamos que no se dé un contagio aquí, mayor, porque ahí sí estaría muy grave la situación”, indicó otro locatario de la Central de Abastos.
Inversión en antibacterial
Para evitar que haya propagación de covid-19 en la Central de Abastos, y ante la situación que enfrentan en su día a día las y los comerciantes, la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) del estado ha invertido 500 mil pesos para proporcionar gel antibacterial, y es personal de la policía bancaria la que vigila que las medidas sanitarias se lleven a cabo en el lugar, además de que haya vigilancia en la toma de temperatura y el paso de las personas por el túnel desinfectante.