En México, el ocho por ciento de los pacientes hospitalizados requieren de un catéter venoso para recibir medicamento por vía intravenosa y para optimizar la toma de muestra sanguínea, para lo cual se usaban comúnmente los Catéteres Venosos Centrales (CVCs).
Estos dispositivos eran colocados por personal médico en un procedimiento prácticamente a ciegas, y con una posibilidad de error cercana al 70 por ciento. El procedimiento implicaba riesgos para los pacientes, destacando las afectaciones en el pulmón (perforación), ya que el catéter CVC suele colocarse cerca de dicho órgano, situación que eleva la posibilidad de agravamiento y de mortalidad.
A lo anterior se sumaban otras dificultades, como el hecho de tener que tomar radiografía para identificar el curso del catéter a través de la vena, lo que implicaba, además, exponer al paciente a la radiación.
Gabriel Adrián García Correa, gerente Clínico y de Consultoría de BD, explicó que una intervención de esta magnitud es de alta complejidad, por lo que en el 19 por ciento de los casos pueden presentarse infecciones, lo que aumenta de 10 a 12 días el internamiento hospitalarios y, por lo tanto, eleva los costos hasta los 20 mil dólares, conforme a los datos estadísticos de internamiento.
Por ello, García Correa anunció como un desarrollo revolucionario los Catéteres Centrales de Inserción Periférica (PICCs), guiados por ultrasonido, para administrar medicamentos de uso prolongado a pacientes oncológicos, quirúrgicos y críticos.
La tecnología de Becton Dickinson (BD) se recomienda para personas que requieren terapia de infusión mayor a siete días y menor a 12 meses, o que necesitan recibir medicamentos y soluciones, nutrición parenteral, quimioterapia, antibioticoterapia y terapias para infusión de células madre hematopoyéticas.
Hasta el momento, 139 hospitales públicos y privados cuentan con esta tecnología, entre estos, de la Secretaría de Salud de la Ciudad de México, en el Cabrera, Xoco, Rubén Leñero, el 20 de Noviembre del ISSSTE, ABC, Dalinde; asimismo, en el ISSEMyM, Instituto de Seguridad Social del Estado de México y Municipios. Para 2023, la idea es instalar 28 equipos adicionales.
"Los PICCs guiados por ultrasonido son actualmente la opción más segura, eficiente e innovadora frente al riesgo de complicaciones médicas y los elevados costos que representa para los sistemas de salud, la inserción de catéteres venosos centrales (CVCs)", explicó durante el evento.
El médico explicó que, a diferencia de los Catéteres Venosos Centrales (CVCs), que se usan también para administrar medicamentos por largos periodos, los PICCs guiados por ultrasonido representan ventajas. Por ejemplo, pueden ser colocados por personal de enfermería debidamente entrenado, lo que libera al personal médico para realizar otras tareas. Además, el procedimiento se lleva a cabo de forma ambulatoria, desbloqueando con ello el uso de quirófanos o unidades de cuidados intensivos en los hospitales.
A esto se suman ciertas ventajas para los pacientes, como el no tener recibir la radiación de los rayos X que se emplean para localizar los CVCs y no exponerse a los riesgos asociados a la colocación de estos, como hemotórax, neumotórax, arritmias y lesión neurológica, complicaciones que se presentan hasta en 19 por ciento de los pacientes, prolongando su estancia hospitalaria entre siete y 12 días; generando gastos de atención de entre 18 y 29 mil dólares por cada uno.
"Algunos PICCs se colocan mediante la técnica Seldinger Modificada, guiada por ultrasonido portátil, lo cual permite verificar la existencia de una vena de tamaño apropiado antes de realizar la venopunción. Esto aumenta la tasa de éxito de inserción del catéter al primer intento, disminuye el riesgo de múltiples punciones y minimiza el riesgo de eventos adversos como neumotórax, hemotórax e infecciones, al tiempo que ofrecen mayor confort y seguridad para el paciente", agregó el doctor García Correa.
Por su parte, María de Lourdes Meléndez, gerente de Medical Affairs en BD México, destacó el papel del personal de enfermería en la colocación de PICCs guiados por ultrasonido en los hospitales del SNS y del sector privado.
Dijo que, a la fecha, hay 100 enfermeros y enfermeras capacitados y 40 certificados por el Consejo Nacional de Normalización y Certificación de Competencias Laborales (Conocer), entidad paraestatal sectorizada en la Secretaría de Educación Pública, que integra representantes de los trabajadores, los empresarios y el gobierno.
"En BD la salud de los mexicanos es nuestro mayor compromiso. Por ello, impulsamos el mundo de la salud y promovemos buenas prácticas clínicas y protocolos de atención con la más alta calidad para garantizar la seguridad de los pacientes y de los profesionales de la salud.
"La certificación del personal de enfermería en la colocación de PICCs guiados por ultrasonido y la adopción de esta tecnología por parte de los hospitales más importantes de México es un paso que fortalece la salud pública en el país", añadió Meléndez.
Finalmente, los expertos hicieron un llamado a la comunidad médica y al personal de enfermería para informarse sobre las ventajas de los PICCs guiados por ultrasonido sobre los CVCs convencionales.
LP