Los simios advierten la existencia de cámaras trampas colocadas en bosques para ver cómo reaccionan a objetos desconocidos, pero las respuestas son variadas y sorprendentes entre las especies.
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Un equipo internacional de investigadores del Instituto Max Planck para Antropología Evolutiva en Leipzig, Alemania, analizó los videos de los dispositivos que mostraba la disparidad de reacciones.
"Nuestro objetivo era ver cómo reaccionan los chimpancés, los bonobos y los gorilas a objetos desconocidos en la naturaleza, ya que los experimentos con objetos novedosos se usan a menudo en la investigación de psicología comparativa, y queríamos saber si había alguna diferencia entre los tres grandes simios", dice Ammie Kalan, primatóloga en el Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva.
"Nos sorprendieron específicamente las diferencias en las reacciones que observamos entre los chimpancés y los bonobos. Ya que son especies hermanas y comparten la misma composición genética, esperábamos que reaccionaran de manera similar a la cámara, pero esta no fue la respuesta."
"En general, a los chimpancés no les interesaban las cámaras; apenas parecían notar su presencia y, en general, no les molestaban", dice Kalan. "Sin embargo, los bonobos parecían estar mucho más preocupados por las cámaras; dudaban en acercarse y mantenían activamente su distancia de ellos".
Los individuos dentro de una especie reaccionaron de manera diferente a las cámaras también. Por ejemplo, los monos que viven en áreas con más actividad humana, como sitios cercanos a la investigación, pueden desensibilizarse con elementos desconocidos y volverse indiferentes hacia tales encuentros en el futuro. Sin embargo, otro miembro de la misma especie que haya tenido menos exposición a elementos extraños o nuevos, podría estar más interesado en ellos. La edad del simio desempeña un papel similar.
"Los monos más jóvenes explorarían más las cámaras al mirarlas durante largos períodos de tiempo", dice Kalan. "Al igual que los niños humanos, necesitan obtener más información y aprender sobre su entorno. Ser curioso es una forma de hacerlo", comentó.
La variedad de respuestas mostradas por los simios y las complejas diferencias entre especies y dentro de una sola especie, demuestran la necesidad de que los científicos consideren cómo responderán los animales a la presencia de equipos de monitoreo desconocidos en sus hábitats naturales.
"La variación dentro y entre las especies de la conducta hacia los elementos desconocidos podría ser problemática cuando se trata de recopilar datos de monitoreo precisos", dice Kalan. "Para frenar este efecto, valdría la pena tener un período de familiarización, en el que los animales salvajes puedan acostumbrarse a los nuevos elementos", dijo.
A pesar de esta complicación potencial, el uso de cámaras trampa para monitorear poblaciones de animales en la naturaleza sigue siendo una de las opciones más útiles. "Nuestro conocimiento tiende a estar limitado por la cantidad de grupos o la cantidad de poblaciones que podemos estudiar, pero el uso de tecnología de monitoreo como cámaras trampa es una forma efectiva de resolver ese problema", dice Kalan.
"Creo que es realmente interesante desde una perspectiva de flexibilidad de comportamiento considerar cómo reaccionan los animales salvajes a estas nuevas tecnologías. Me encantaría que más investigadores investiguen respuestas novedosas mientras realizan encuestas de monitoreo".
RV