No necesitas horas de maquillaje para que tu rostro se vea luminoso. Un cambio tan sencillo como la forma en la que aplicas el corrector puede ser la solución. Checa estos cuatro tips para que tu cara luzca fresca y radiante.
Elige el tono de base correcto
Un truco infalible para elegir el tono correcto para la base de maquillaje es probarla en tu cuello y no en el antebrazo como se acostumbra. Si la pones en el cuello será más fácil mediar entre el tono de tu rostro y el de la piel de esa zona, que es con la que realmente se contrastará tu maquillaje cuando te lo pongas. Con este truco no puedes fallar.
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Aplica el corrector en forma de triángulo
En lugar de seguir el contorno del párpado para cubrir las ojeras traza un triángulo invertido con el corrector y difumina bien con tu base. Te sorprenderás, pues tu rostro lucirá más natural e iluminado en el mismo tiempo que ya usabas para maquillarte.
Delineador color piel para disimular ojeras
Si estás desvelada y cansada, no tienes que maquillarte completa para verte bien. Opta por un estilo nude, muy natural, que te hará ver fresca y radiante; lo mejor es que sólo le dedicarás pocos minutos.
Aplica un poco de corrector debajo de tus ojos y delineador color piel en el párpado inferior. Este sencillo truco marcará la diferencia entre una mirada cansada y una muy fresca.
Ahorra tiempo al desmaquillarte
Si llegas tan cansada que no te puedes mantener en pie, y mucho menos desmaquillarte de manera adecuada, no te preocupes, usa toallitas desmaquillantes.
Te ahorrarán mucho tiempo porque sólo debes pasarlas gentilmente por tu rostro, boca y ojos; además, podrás ir a la cama pronto y dormirás con la piel libre de maquillaje. Por la mañana tendrás tiempo de hacerte una limpieza más adecuada y completa.
mrf