Siguiendo la tradición clásica de maestros y alumnos peripatéticos —que caminaban alrededor de los jardines hablando de Aristóteles, Platón, los presocráticos, los astros y algunos otros asuntos—, me decidí explorar los pasillos del pensamiento filosófico de la FIL, y esto es lo que encontré:
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1) Relojes que se detienen, manecillas que se aceleran. Durante esta FIL, uno de los iconos de la filosofía que nos visitó desde Italia fue Giacomo Marramao. Me he quedado con Kairós, un libro bellísimo que se puede conseguir en el stand de Gedisa. Una reflexión muy ad hoc para estos tiempos que corren en sentido metafórico y también en sentido literal. El libro de Marramao hace una fuerte crítica a la acelerada rutina de la vida actual, a esta era contemporánea que no nos deja tiempo más que para el trabajo y el rendimiento. Un tiempo que todo lo cuantifica, y que también tiene la “obsesión por el futuro” inexistente y no muy distinto al tiempo de dios, porque ambos son tiempos que el individuo no logra apropiarse”. Marramao sugiere más bien una vuelta a ese tiempo originario del Kairós. Recuperar el Kairós, escribe Marramao, es recuperar también el tiempo de la templanza en el cual los sucesos importantes no deberán forzarse, sino acaecer en el tiempo oportuno: “ni demasiado pronto, ni demasiado tarde”. Recuperar el sentido del Kairós es así entender la circunstancia propia en conexión con el tiempo de los demás y con el tiempo de la polis: de la vida pública que puede ser de crisis o de bonanza, que puede ser de progreso o de penuria, y a partir del cual el individuo, ese hombre o mujer que va marcando con horas también sus metas, logre desplegar “la ipseidad múltiple de la que tanto se habla hoy, aunque siempre dentro del marco de lo inquietante”.
2) De neuronas y otros asuntos. En las últimas décadas, con el avance de las tecnologías para estudiar el cerebro humano, se ha acelerado el avance de las neurociencias, y con ello la necesidad de preguntarse no solo por la fisiología del cerebro, sino también por los asuntos normativos y psicológicos de la mente. El reto está en la investigación interdisciplinaria del cerebro-mente, en los puentes que las ciencias médicas pueden construir no solo con la filosofía sino con el resto de las humanidades. Es imposible seguir sustentando la investigación en una sola disciplina. Hacerlo es pecar de reduccionismo y anacronismo. Entendiendo la complejidad de estos temas, Jorge Alberto Álvarez-Díaz presentará su libro Neuroética: relaciones entre mente-cerebro y moral-ética este jueves a las 13:00 horas en el Foro UAM (stand I-10).
3) Un banquete bien servido de ideas filosóficas. Este año se cumplen quince años del Banquete de Filosofía, el único en su especie dentro del rubro de la Feria Internacional del Libro. La idea del Banquete, desde sus inicios, ha sido la de volver a esa primera idea lúdica de la filosofía, al ejercicio dialógico entre pares, quienes en vez de explayarse en densos argumentos e inalcanzables edificios conceptuales esquiva —al menos por un día— la idea críptica y jerárquica de hacer filosofía, para regresar al ágora, a la discusión entre maestros y discípulos en el sentido antiguo; de “parresía” lo llamaría Foucault, esto es, como una verdad expuesta a muchos escuchas en una plaza pública, fuera de la institución académica, que lejos del discurso acartonado sugiera una práctica de vida. En este sentido, el Banquete ha tenido la motivación de invitar filósofos con la capacidad de comunicar sus ideas en un foro amplio y no solo a interlocutores especializados.
Bajo esta clara intención divulgativa, aunada a la urgencia de resignificar el trabajo del filósofo, este año se volvió más que nunca pertinente la inserción activa de la filosofía en la sociedad. Hoy más que nunca es necesario pensar cómo puede tener un trabajo más activo y comunitario. Por ejemplo, ¿cómo puede la filosofía ayudar a mejorar políticas públicas, a tener un impacto real en los asuntos relacionados con la justicia, la crisis migratoria, la crisis de valores, la crisis de legitimidad de las instituciones gubernamentales? E incluso, ¿cómo puede la filosofía formar generaciones conscientes, no solo en el plano de la educación superior, sino también tener una influencia clara desde la educación básica?
Con la idea de responder estas y otras preguntas alrededor de la pertinencia social y política de la filosofía, este capítulo del Banquete está dedicado al tema “Filosofía, ciudadanía y educación (Una alternativa para pensar el mundo)”. La organización corre a cargo de Cuauhtémoc Mayorga, y los participantes de este año serán Pedro Stepanenko, Axel Arturo Barceló, Carlos Pereda, Margarita Valdés Villarreal, Fernando Leal, Guillermo Hurtado y Antonio Campillo, todos ellos con reconocida trayectoria académica. La cita es este sábado 7 de diciembre, a las 10:00 horas, en el área de eventos del Hotel Hilton.
ÁSS