Tú me odias, ¿verdad?”, le decía Emilio Azcárraga Milmo a Miguel Sabido, una promesa literaria que entró al mundo de la televisión de la mano de Ernesto Alonso, con quien hizo, por ejemplo, las exitosas telenovelas históricas, y comprobó a tal grado su talento para contar historias, que lo ha hecho con éxito durante casi 60 años en diferentes escenarios: teatro universitario, pastorelas majestuosas, programas de televisión así como las telenovelas históricas y educativas.
Azcárraga Milmo le decía: “Tú me odias, ¿verdad?”, cada vez que Sabido entraba a su oficina a hacerle una propuesta. “Yo no le tenía miedo, a Azcárraga Milo esa es la diferencia con mucha gente que lo veía como un gigante inaccesible y yo no le tenía miedo porque veía en él a la persona, al hombre. Lo conocí bien, era buena persona solo que era muy duro al momento de expresarse, sin medias tintas y como le nacía. Eso le trajo problemas”, recuerda Sabido en la sala de su casa, donde hace un mes lucía una ofrenda de Día de Muertos en que la única fotografía que no correspondía a su familia era, precisamente, la de El Tigre.
Entre sus conquistas, que son muchas, se cuenta el haber creado, dirigido y producido el Canal 9 de corte cultural que no tenía comerciales y durante 10 años registró niveles importantes de audiencia. Para él no existen fronteras entre la alta cultura y la cultura popular, por eso dice que ha podido trabajar en ambas, sin conflicto alguno. Lo suyo es contar historias, y si son de mujeres o protagonizadas por ellas, mejor, pues admira de este género su capacidad comunicativa porque, asegura, ésta proviene del útero; de ahí sus obras: Falsa crónica de Juana la Loca; Malinche, Las máscaras de Sor Juana y Soldadera.
Ahora, a propósito de los festejos por sus 80 años de edad, que cumplió en noviembre pasado, hace un breve repaso por su trayectoria profesional, para comentar también algunas de las actividades que con este pretexto se realizarán de aquí hasta finales de 2018, incluido un homenaje en el Palacio de Bellas Artes, que fue pospuesto a causa del sismo del 19 de septiembre.
“He sido afortunado”
“Estudié leyes, pero fue la literatura, con Luisa Josefina Hernández, maestra de composición dramática en la Facultad de Filosofía y Letras que encontré mi camino. En 1960 fundé y dirigí el Teatro Pedagógico y en 1964 creé la Asociación Civil Teatro de México. Escribí mi primera obra de teatro en 1959; he dirigido muchas desde entonces, escribí la primera telenovela histórica La Tormenta sobre la invasión francesa a México, que dio paso a cinco telenovelas históricas más. He sido un hombre muy afortunado”, dice.
De su telenovela Ven conmigo, dice que “logró que casi un millón de adultos se integraran al Plan Nacional para la Educación de Adultos, para que terminaran su educación básica”, dice. Después realizó producciones televisivas como Acompáñame, Caminemos y Vamos juntos, que tuvo efectos importantes en el control demográfico de aquellos tiempos.
En 1982 la Organización de las Naciones Unidas (ONU) le entregó el reconocimiento Savior of the Earth, entre otros premios que suman más de 70. En el cine, su ópera prima Celestina y su extraordinario Santo Luzbel obtuvieron premios y buenas críticas.
Entre las actividades que enmarcan su 80 aniversario se hallan la presentación (ayer) de Falsa crónica de Juana la loca en el Ex Templo de Corpus Christi y hoy miércoles a las 19:00 horas, la Fundación Miguel Alemán ofrecerá una mesa-diálogo con Álvaro Cueva en torno a sus telenovelas históricas.
Igualmente está por confirmar la representación de sus pastorelas en el restaurante Arroyo, así como el montaje de estas obras en teatros del Instituto Mexicano del Seguro Social en el programa Ocho días de funciones de Pastorela.
En enero próximo en el Centro Cultural Zacatenco del Instituto Politécnico Nacional se llevará a cabo una lectura de textos del libro Daguerrotipo (retratos de Juan Rulfo, Inés Arredondo, Pita Amor, Pita Dueñas. Actores: Tere Colón y Rubén Moya). El 24 de febrero, en La capilla del Palacio de Minería, a las 13:00 horas se llevará a cabo la lectura de monólogos.
Para marzo, en el Palacio de Bellas Artes, actrices como Angélica Aragón, Itatí Cantoral o Martha Zavaleta darán lectura a sus obras.