Gijs Bakker (Amersfoort, Países Bajos, 1942) y su esposa, Emmy van Leersum (1930-1984), nunca tuvieron miedo a transformar el diseño. A finales de los años sesenta, se les vio como una pareja que revolucionó este campo al desafiar la forma de crear mediante la mezcla de moda, diseño y arte con nuevos materiales.
En colaboración con el Museo Stedelijk de la ciudad 's-Hertogenbosch (Bolduque), del Reino de los Países Bajos, el Museo Franz Mayer anunció ayer la muestra CHP…? Joyería. Un proyecto de Gijs Bakker, en la que se podrán ver más de 120 piezas de 50 diseñadores de la fundación CHP…?, que Bakker creó en 1996.
CHP…? —proviene del italiano Chi ha paura…?, que en español significa “quién tiene miedo a…”— es la manera en la que Bakker se cuestiona ante la joyería contemporánea. Él, según afirmó Héctor Rivero, director del recinto, es impulsor del movimiento de joyería “barata”, porque sus piezas están pensadas y creadas a partir de materiales considerados de bajo costo.
Durante la conferencia de prensa, Bakker explicó que desde el inicio de su carrera se desprendió de la idea de hacer joyería con materiales lujosos, y se inclinó por materiales que no eran usuales, como el acero inoxidable y el aluminio.
“Para mí todos los materiales son iguales y toman significado cuando el diseñador hace algo con ellos. En los sesenta, cuando inicié mi carrera, yo decía ‘no go’. Quería hacer otras cosas, no había dogmas y podía utilizar todo lo que quería”, dijo. Por ello se interesó en nuevos materiales para experimentar.
La exposición muestra una pequeña retrospectiva del trabajo del diseñador, a la que se suman propuestas de 50 artistas reconocidos apoyados por el proyecto CHP…? e invitados por Bakker a desafiar los principios clásicos de la joyería para crear piezas a partir de una idea o concepto, con el objetivo de mostrar que una pieza de ese arte es más que un accesorio decorativo.
CHP…? Joyería. Un proyecto de Gijs Bakker está dividida en siete proyectos que abordan el cuerpo, el lujo, los rituales, la innovación y la identidad global, elementos que hacen una joyería, según define Bakker, “desafiante”. Estará abierta desde hoy y hasta el 2 de octubre en el Museo Franz Mayer.
ASS