La figura del mánager de beisbol es interesante si se compara con otros estrategas. Mientras que en el futbol, basquetbol y voleibol, los entrenadores suelen utilizar traje y corbata, mientras que en el futbol americano los head coaches usan prendas con logos del equipo al que dirigen, el manejador de una novena utiliza el uniforme de su equipo.
Sí, como si se trataran de otro jugador con el turno al bate o que se prepara para subir a la lomita, los mánagers se visten con la franela de su equipo… aún cuando muchos de ellos no tienen ya la condición física para conectar pelotas a profundidad, mandar rectas de más de 90 millas por hora o robar bases.
El origen
La realidad es que en los primeros años del beisbol, el mánager era también el capitán del equipo, por lo que tenía que utilizar el uniforme para jugar y realizar los cambios pertinentes, de acuerdo con su lectura del juego.
Pero a lo largo de la historia, los manejadores dejaron de jugar a la par de sus también compañeros y tomaron la postura de dirigir únicamente. Algunos sí dejaron de usar el uniforme, como lo hizo Connie Mack como mánager de los Atléticos de Filadelfia entre 1901 y 1950, en tanto Burt Sutton, ex manejador de los Dodgers de Brooklyn, tenía momentos en los que usaba un traje, aunque también portaban la chaqueta del equipo cuando hacía frío.
Aún con esto, muchos conservaron la tendencia de portar el uniforme, ya sea por tradición, identidad o comodidad.
El reglamento también entra en juego
Aunque no es una obligación, muchos también señalan que, además se debe al reglamento de Grandes Ligas, con su regla 3.03, en la que se establece que “todos los jugadores de un equipo deben usar uniformes idénticos en color, corte y estilo, y todos los uniformes de los jugadores deben incluir números mínimos de seis pulgadas en sus espaldas”.
En este sentido, se describe al entrenador como un “miembro del equipo en uniforme designado por el mánager para realizar las tareas que el gerente pueda designar, como, entre otras, actuar como entrenador de base”.
Es verdad que el reglamento no especifica que el mánager debe esta uniformado, pero una razón la podríamos encontrar en la regla 4.07, en la que se establece que “no se permitirá a ninguna persona en el campo de juego durante un juego, excepto a los jugadores y entrenadores en uniforme, administradores, fotógrafos de noticias autorizados por el equipo local, árbitros, oficiales de la ley en uniforme y vigilantes u otros empleados del club de origen”.
En el banquillo se señala que los asientos están “reservados para jugadores, sustitutos y otros miembros del equipo uniformados cuando no participan activamente en el campo de juego”.
Aunque no se especifica que el mánager debe utilizar uniforme o ropa del equipo, las normas parecen indicar que así debe ser para que accedan al dugout, además de entrar al campo cuando sea necesario para reemplazar a sus lanzadores, darles indicaciones a sus peloteros e incluso ir con el ampáyer a hablar.
OMCS