"¡Te has vuelto loco, te has vuelto loco! ¿puedes dejarme jugar?": en pleno cuarto set y con el control del partido totalmente perdido, el ruso Daniil Medvedev arremetió con dureza desde su silla contra su entrenador Gilles Cervara... quien optó por abandonar las tribunas.
Medvedev se había adjudicado con solvencia los dos primeros sets ante Filip Krajinovic, antes de que el serbio se apuntase los dos siguientes y pusiese las espadas en todo lo alto. Ya sin su entrenador presente, el ruso recuperó su mejor nivel y endosó un 6-0 a su rival en el set definitivo para clasificarse a octavos de final.
"Por supuesto que su marcha y el hecho de que me pusiese a jugar mejor están relacionados", comentó Medvedev tras el partido.
"Él me dijo que estaba convencido de que iba a ganar y simplemente quiso dejarme solo para que yo me tranquilizara", explicó el impetuoso tenista ruso, que se comunica en francés con su entrenador.
"Fue solo un momento en el que, como seres humanos, estábamos los dos frustrados porque los dos queríamos la victoria, yo como jugador y él como entrenador", añadió.
"Entonce él parece que consideró que era lo mejor que podía hacer. En algunas ocasiones no habría estado de acuerdo, pero ahí era seguramente lo mejor", prosiguió el ruso de 25 años.
"Eso ocurre una vez al año, dos como máximo. Pero hoy, eso me ayudó. Por supuesto que lo hablaremos, pero no hay nada grave", concluyó.
Cervara es entrenador de Medvedev desde 2014 y llevó a su jugador a la élite del tenis mundial: final del US Open en 2019, victoria en el Masters de fin de año el año pasado, y 4º puesto en la actual clasificación ATP.
ZZM