El plantel definitivo de las WTA Finals en Guadalajara se decide en Cluj. Anett Kontaveit parte como la segunda clasificada en el Transylvania Open y al final del camino pueden esperarla dos premios: el título del certamen y un boleto a las finales de la Perla Tapatía.
Con la baja de Ashleigh Baty de las WTA Finals, solo queda un puesto disponible. La propia Kontaveit y Ons Jabeur son las únicas que pueden optar por ese boleto, pero Anett es la única activa en esta semana. A la nacida en Estonia, únicamente le vale el trofeo al final de la semana para poder clasificar a Guadalajara; cualquier otro resultado, le daría a la tunecina el pase.
La misión de Kontaveit en Rumania inicia ante Aleksandra Krunic, la 140 del mundo. Después se encontraría con Alison Van Uytvanck en octavos de final. En el resto de la parte baja del cuadro, solo queda una preclasificada: Anhelina Kalinina, por lo que el panorama luce esperanzador para Anett en una final que podría ser ante Simona Halep o Emma Raducanu.
La carrera a Guadalajara tomó un sentido inesperado cuando Kontaveit conquistó la Kremlin Cup, el WTA 500 de Moscú. En ese mismo certamen, Jabeur, la otra interesada en las WTA Finals, tuvo que retirarse en la primera ronda. Un par de victorias le hubieran bastado a Ons para asegurar su lugar en Jalisco, pero ahora depende de los resultados de la número 14 en el ranking.
Kontaveit empezó a ser una contendiente seria a las WTA Finals en el segundo semestre de la temporada, donde consiguió los tres títulos del año hasta ahora. Los campeonatos en Cleveland, Ostrava y Moscú y los mil 250 puntos que produjeron la catapultaron a los puestos de retadora en la temporada.
A pesar de haberse quedado en la primera semana de todos los Grand Slams, Kontaveit encontró en los WTA 500 y 250 la oportunidad perfecta para ganar terreno. En Transylvania busca su cuarto campeonato del año y el primer boleto a unas WTA Finals en su carrera.
JMH