Luego de acaparar reflectores en el estreno mundial de Magic Mike's Last Dance con un atrevido vestido transparente de red, Salma Hayek asistió al night show de Jimmy Kimmel en donde reveló que estuvo a punto de perder la vida mientras grababa una escena sensual con el actor Channing Tatum.
La veracruzana regresa a la pantalla grande con la tercera y última entrega de la trilogía que sigue la vida del striper Mike Lane, interpretado por Tatum. La película significó un completo desafío para la actriz debido a las complicadas coreografías de baile que tuvo que aprender.
De hecho, fue durante las grabaciones de una escena de lap dance que Salma Hayek vivió una angustiante experiencia e, incluso, terminó discutiendo con su coprotagonista.
La actriz contó que en la secuencia tenía que bailar sobre el abdomen de Tatum; sin embargo, no siguió las instrucciones y casi se pega en la cabeza.
"Estoy boca abajo y mis piernas tenían que estar en alguna parte, pero al revés uno pierde el sentido de dirección y no hice lo que se suponía que debía hacer. En el ensayo yo estaba boca abajo y casi me golpeó".
Hayek estaba de cabeza, por lo que Channing Tatum la sujetó por las piernas para evitar que se fuera al piso, pero la actriz en lugar de poner las manos en el suelo para no caer se tomó los pantalones, pues temía que se le resbalaran, ya que no recordaba si traía ropa interior.
"Entonces, en lugar de poner mis manos para proteger mi cabeza, simplemente me aferré al pantalón. Él dice 'Levanta las manos' y yo dije 'No, no, no, no'".
La estrella mencionó que miembros de la producción se acercaron para auxiliarlos y, por fortuna, la situación no fue más allá de un susto. Sin embargo, confesó que hubo unos minutos de tensión entre ella y Tatum, puesto que se reclamaron por lo mal que había quedado la escena.
"Todos entraron y como que me alejaron de él y él dijo: '¿qué te pasa?'. Dije: '¿Qué me pasa? Casi me matas'", contó.
Salma Hayek, feliz de estar en una película de stripers
La mexicana mencionó que era consciente de los riesgos que implicaba hacer lap dance a sus 56 años, no obstante, comentó que está agradecida por haber sido parte del proyecto.
"Me lo merezco porque tuve que interpretar a la stripper en tantas películas antes, y ahora puedo sentarme y disfrutarlo. Fue emocionante, pero al mismo tiempo peligroso".
amt