Acabar con la sobreexplotación de acuífero, no eliminará arsénico del agua: Especialista

El Análisis Costo Eficiencia del Proyecto “Agua Saludable para La Laguna”, del Organismo de Cuenca, Cuencas Centrales del Norte, refiere que los primeros antecedentes de la contaminación de arsénico en la Región Lagunera datan de 1962; sin embargo, el documento señala que la presencia de esta sustancia en el agua, no es exclusiva de está zona del norte del país. Por décadas, este fenómeno ha existido en muchas otras comunidades en México. 

Juan Estrada Avalos, director del Centro Nacional de Investigación Disciplinaria en Relación Agua, Suelo, Planta, Atmósfera (CENID RASPA), ubicado en la Comarca Lagunera, coincidió que el arsénico, al igual que otras partes del país, se da en forma natural en el subsuelo lagunero. Por tal motivo y contrario a lo que se ha socializado, terminar con la sobreexplotación del acuífero, no eliminará la presencia de este metaloide en el agua.

Entrevistado en las oficinas ubicadas al interior del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP), en Gómez Palacio, el especialista destacó la necesidad de que la población entienda que el arsénico es un metaloide que está en su subsuelo, no sólo de la región lagunera, sino en otras más del país como en el estado de Hidalgo.

“Además, hay la presencia de otros elementos como flúor, es una condición preexistente de la región. Por lo que dejar de extraer o sobreexplotar el acuífero no desaparecerá el arsénico, ya que está ahi de manera natural”, enfatizó.

Si bien reconoció que hay áreas en La Laguna donde sí existe mayor concentración de arsénico, recordó que en los años cincuenta, cuando el agua aún era extraída de niveles más superficiales, presentaban contenido de arsénico.

“Hay dos teorías: Que el arsénico está en las rocas por naturaleza y la otra es que con los escurrimientos, una parte de arsénico viene de la parte alta, se va infiltrando, pero el dejar de extraer no corrige o desaparece el arsénico”.

Si bien aceptó que la presencia de arsénico en el agua se ha vinculado con la sobreexplotación del acuífero al extraerse agua de mayor profundidad, esto se debe no a que haya mayor cantidad de metaloides, sino que ha tenido mayor tiempo de residencia; es decir: A mayor profundidad más tiempo de contacto ha tenido el agua con las rocas y por eso es que hay mayor concentración no sólo de arsénico sino de otros elementos, aseguró.

“Se tiene que llegar a un equilibrio, en este momento se extrae más agua de la que llega al acuífero. Las medidas que se tienen que implementar como la tecnificación de la agricultura puede ser una de las opciones".

" La parte importante está en la parte agrícola y mediante un uso eficiente del agua, que lo permite la tecnología actual, se puede reducir la extracción del agua subterránea”, exhortó Estrada Ávalos.

Recuperación el acuífero: La mejor forma de combatir el hidroarsenicismo

Para el ambientalista e integrante de la Asociación Encuentro Ciudadano Lagunero, Gerardo Jimenez González, la mejor manera de combatir el problema del hidroarsenicismo en la Comarca Lagunera será trabajando por la recuperación y el equilibrio en los niveles de agua del acuífero. Así se podrán observar no sólo la recuperación paulatina de dichos niveles, lo que garantizará contar con este recurso a largo plazo, sino que se elevará la calidad del agua.

Para lograr esto sugirió: “Que se controle la extracción ilegal y se apliquen recargas controladas para que suban los niveles de los mantos freáticos. Nuestra propuesta es que se comience la recarga a través del cauce del río en la zona metropolitana”.

Recordó que hace una década, investigadores del Instituto Mexicano de Tecnología del Agua (IMTA), hicieron dos experimentos de recarga. Los resultados fueron que en los sitios donde hicieron las recargas, pusieron “piezómetros”, en los pozos que permitieron observar el comportamiento en los niveles de agua y se observó que el nivel subió así como la calidad del agua, se elevaron.

En su opinión, si se dota de un caudal ecológico o volumen de agua por el lecho seco del Río Nazas en la zona metropolitana de La Laguna, inyectando agua para que se eleve del nivel del agua en el acuífero, se tendrán resultados de manera paulatina pero segura.

Dijo que el diseño conceptual de Agua Saludable para resolver el problema de hídrico en la región, se debe enfocar a las causas y no a remediar los efectos, ya que se está ofreciendo agua potable por 25 años para la población, pero esto dependerá del agua que se precipite en la parte alta y media de la cuenca.

Transición productiva, una opción de reducción de extracción

Para Gerardo Jimenez González , resulta “inevitable e ineludible”, el establecer un sistema de medición en la extracción confiable para el próximo año, añadiendo un programa de recuperación del acuífero para el 2022, pero advirtió que será la propia Conagua quien debe solicitar estos fondos para agregar estas acciones al programa de Agua Saludable para La Laguna.

“Además se tiene que apostarle a una transición productiva donde modifiquen los cultivos de alta demanda por los de baja demanda; que se tecnifique y disminuyan los volúmenes que requieren sin que se afecte el modelo de producción y mantener la cuenca lechera”.

Explicó que el 100% del agua que se extrae de las presas se utiliza para la agricultura, en el distrito de Riego 017, la eficiencia global es de 40%; es decir, que de cada metro cúbicos que se extrae de las presas, sólo se utilizan 40 litros de agua: “La tecnificación que permite un mejor manejo de agua superficial, aumenta la eficiencia y se rescatan volúmenes que en la actualidad se pierden”.

Insistió que se debe tener una estrategia de recuperar los volúmenes que se extraen ilegalmente y ayudar así con recargas al acuífero. Esto permitirá resolver este problema para las generaciones futuras, se mejorará el nivel de los pozos, se mitigará el problema del desabasto y se garantizará la calidad de agua para consumo en donde hay mayores problemáticas y concentración de arsénico en la zona rural, en municipios como Tlahualilo, Francisco I. Madero, San Pedro, Viesca, donde las concentraciones de arsénico son más altas y tiene mayor afectación a la salud.

El arsénico en la Comarca Lagunera, de acuerdo a Agua Saludable

La presencia de arsénico en el agua de muchas comunidades en México, ha sido identificada desde los años 60 en la Comarca Lagunera, localizada en los Estados de Coahuila y Durango. 

Es La Laguna, la región del país que ha sido la más estudiada en México y donde se vinculan los problemas en la salud por el consumo de agua con arsénico. El Análisis Costo Eficiencia del Proyecto “Agua Saludable para La Laguna”, reifere que en esos años, se notificaron 40 casos graves y una defunción en el sector urbano de Torreón, Coahuila. 

A raíz de este evento se realizaron estudios epidemiológicos y clínicos de 496 habitantes de las colonias afectadas, encontrándose 297 pobladores con signos y síntomas, y positividad en laboratorio de arsenicismo; de ellas 217 presentaban síntomas benignos, en 70 fueron severos, en ocho graves y se registraron ocho defunciones.

El arsénico es una de las 10 sustancias químicas que la OMS considera más preocupantes para la salud pública. El límite recomendado para la concentración de arsénico en el agua potable es de 10 μg/l (0.010 mg/l/microgramos por litro), aunque este valor de referencia se considera provisional dadas las dificultades de medición y las dificultades prácticas relacionadas con la eliminación del arsénico del agua de bebida.

En un estudio sobre arsénico en 128 pozos de agua localizados entre Durango y Coahuila, se detectó que más del 50% de las muestras tenían niveles mayores de 0.05 mg/l. En 1986, la Universidad Autónoma de Coahuila evaluó el estado de salud de una muestra de 5 mil 903 habitantes de la Comarca Lagunera, de los cuales 204 (3.4%) presentaron lesiones relacionadas con el arsénico y 15 (0.2%) presentaron lesiones cancerosas, todos ellos del municipio de Francisco I. Madero.

¿Qué es el CENID RASPA-INIFAP?

El Centro Nacional de Investigación Disciplinaria en Relación Agua, Suelo, Planta, Atmósfera (CENID RASPA); se ubica en la Comarca Lagunera en el municipio de Gómez Palacio, Durango, y pertenece al Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP). Sus áreas de investigación son la reconstrucción de clima, manejo integrado de cuencas, agricultura protegida, ingeniería de riego y suelos.

El Centro posee laboratorios especializados en agua suelo planta y medio ambiente, así como un laboratorio nacional de Dendrocronología. El primero trabaja en áreas de oportunidad, calidad del agua de riego, contaminantes regulados por normas vigentes, contaminantes emergentes (plaguicidas, fertilizantes, hormonas, antibióticos, elementos traza).

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