El día especial se derrumbó como el edificio ubicado entre Ámsterdam y Laredo el pasado 19 de septiembre, cuando el sismo lo echó abajo, pues ya no se celebró una boda programada para los próximos días.
Un velo de novia y un paquete con invitaciones listas para repartirse fueron algunos de los objetos que se recuperaron debajo de los escombros del inmueble de la colonia Hipódromo. También libros, juguetes, ropa, fotografías familiares, diarios y poemas.
“Encontré unas invitaciones de boda, había varias, entonces supuse que la persona se iba a casar, porque eran demasiadas, y pregunté... sus ojos se llenaron de lágrimas y me dijo: ‘Sí, se iban a casar’. Eso sí me sintió, planeas muchas cosas”, dijo Edith Martínez, estudiante de Ciencia Política en la UNAM.
Como ella, un grupo de estudiantes de diferentes licenciaturas apoyan como brigadistas para recolectar los objetos que salen de entre los escombros. Omar Lugo, estudiante de Medicina de la Universidad Anáhuac, contó a MILENIO que encontró el diario de Gaby, cuyo cuerpo fue rescatado ayer, cerca de las 5:40 de la mañana.
“Teníamos mucho contacto con los familiares y sabíamos quién era. Empezó a salir mucho de su papeleo. Me conmovió que en el diario mostraba mucho sus sentimientos. Recuerdo que mencionaba el nombre de su hija, Alexa, lo siento mucho por los familiares”, expresó.
Los familiares de Gabriela, de 44 años, comenzaron a preocuparse por ella el martes pasado, porque después del sismo no fue por su hija a la escuela. Cuando sus parientes llegaron a su vivienda se encontraron con una sorpresa: el edificio se había desplomado.
Para Naomi Rueda, estudiante de derecho, esta experiencia ha cambiado su vida. “Hemos encontrado dinero, pasaportes, documentos oficiales, muchos juguetes, vajillas completas intactas, maletas de viaje, estaban llenas, parecía que se iban a ir de viaje... hay fotografías y su trabajo se echó a perder, había muchas cámaras, lentes, material, negativos, todo lo estamos guardando por si viene a recogerlo”, explicó.
De acuerdo con Azucena Triana, representante del gobierno de Durango, edificio que se ubica frente al de Ámsterdam que se desplomó, las pertenencias personales se guardarán en el inmueble y las personas podrán recuperarlas.
Indicó que ropa, juguetes y otros aparatos se llevarán hacia otra zona para que ahí puedan recogerlos sus familiares, y toda la información se les brindará en la casa conocida como verde.
Ayer por la noche, las labores de búsqueda y rescate terminaron en esta zona. El último cuerpo sin vida rescatado fue el de Norma, de 86 años. De siete personas atrapadas entre los escombros, solo dos sobrevivieron.
Cerca de 800 personas, entre brigadistas, militares, policías y bomberos entonaron el Himno Nacional en memoria de los fallecidos en este multifamiliar.
Elementos del Ejército que se encontraban en la zona agradecieron la colaboración e informaron que los operativos de rescate han culminado, por lo que el inmueble será demolido a partir de hoy. Con ojos llorosos, los brigadistas se retiraron poco a poco del cruce entre Laredo y Ámsterdam, donde trabajaron durante más de 50 horas.
CONTACTO CON DOS MUJERES
En el sur de la ciudad, en el multifamiliar Tlalpan, continúan las labores para rescatar a siete personas del edificio 1C que se desplomó tras el terremoto del martes.
La angustia se ha prolongado por horas, ya que, según los rescatistas, han tenido contacto con dos personas que aseguran llamarse Viridiana y Fátima.
El inmueble, ubicado en Tlalpan y Taxqueña, era de cinco pisos con 40 departamentos. Ayer por la mañana rescataron los cuerpos sin vida de tres personas: un adulto y dos menores. El miércoles pasado fue rescatada una niña de ocho años, quien había pasado más de 30 horas entre los escombros.
En esta unidad habitacional, que apenas en julio pasado cumplió 60 años, los rescatistas y voluntarios laboran día y noche con la esperanza de localizar a alguien con vida.