El huracán Florence disminuyó a categoría tres, pero sigue siendo temible y está a menos de 48 horas de tocar tierra en la costa este de Estados Unidos, entre los estados de Carolina del Norte y Carolina del Sur, con efectos que se prevén catastróficos.
Aunque los vientos máximos de la tormenta disminuyeron a 195 kilómetros por hora, el Centro Nacional de Huracanes (CNH) estadunidense señaló que la tormenta aumentó en tamaño y energía, "lo que creará un evento significativo de marejada ciclónica”.
La tormenta tiene una envergadura de más de 800 kilómetros, mayor que estados como Tennessee, Michigan o Carolina del Sur, o del tamaño de Florida, y se estima que estará sobre la costa de las Carolinas hasta por 48 horas, provocando lluvias, de acuerdo con algunos meteorólogos.
Florence será, con toda probabilidad, la tormenta más intensa que golpeará la región en 25 años, desde el ciclón Hugo.
"Esta será la tormenta de la vida en partes de la costa de Carolina", escribió el Servicio Meteorológico Nacional en Wilmington, Carolina del Norte, "y eso es mucho decir dados los impactos que hemos visto de los huracanes Diana, Hugo y Fran, Bonnie, Floyd y Matthew".
Las proyecciones del CNH indicaban que Florence giró ligeramente más hacia Carolina del Sur y el cono de probabilidades abarcaba ahora el noreste de Georgia.
Según los pronósticos, el centro de Florence tocará tierra el próximo viernes alrededor de la frontera de Carolina del Norte y Carolina del Sur con categoría tres, provocando una marejada ciclónica de hasta tres metros de altura.
Más de un millón de personas deben evacuar las zonas costeras bajas de las dos Carolinas, y unos 10 millones de residentes desde Georgia hasta Virginia están bajo advertencia o vigilancia de huracán, informó el Servicio Meteorológico Nacional.
El presidente estadunidense Donald Trump instó a las personas que viven en las zonas que se prevé impactará el huracán a cumplir con todas las órdenes de evacuación e instrucciones de emergencia.
"La protección de la vida es la máxima prioridad absoluta", dijo el mandatario el miércoles desde la Casa Blanca al advertir que Florence podría ser "una de las (tormentas) más grande en llegar a la costa este".
Trump dijo que su administración está en "estrecho contacto" con los gobiernos estatales y locales que pronto se verán afectados por la gran tormenta.
jamj