Jordania anunció que está dispuesta a liberar a una kamikaze iraquí, tal y como exigió el grupo Estado Islámico, poco antes de que expire el ultimátum de los yihadistas que amenazan con ejecutar a un piloto jordano y a un periodista nipón.
"Jordania está dispuesta a liberar a la prisionera Sajida al Rishawi si el piloto jordano es liberado sano y salvo", declaró el portavoz del gobierno Mohammad al Momeni, según la televisión jordana.
En un vídeo difundido el martes, el grupo EI exigió la liberación en un plazo de 24 horas, que vence a las 14:00 GMT del miércoles, de la yihadista iraquí Sajida al Rishawi, condenada a muerte en Jordania, a falta de lo cual ejecutará al piloto Maaz al Kasasbeh y al rehén japonés Kenji Goto.
"Desde el comienzo, la posición de Jordania fue garantizar la seguridad de nuestro hijo, el piloto Maaz al Kassasbeh", dijo el portavoz citado por la televisión.
Poco antes, un responsable había desmentido que Sajida al Rishawi hubiera sido trasladada de la cárcel en vistas a una liberación.
Sajida al Rishawi fue condenada a muerte en Jordania por complicidad en los atentados que causaron la muerte de 60 personas en Amman en noviembre de 2005.
Fuentes oficiales y militares jordanas señalaron por su parte que el mensaje de EI reclama la liberación de la iraquí a cambio de la liberación del rehén japonés pero que no menciona la liberación del piloto.
"En cambio amenaza con matar a los dos", si Al Rishawi no es liberada, dijeron las fuentes.
En la mañana, el primer ministro japonés Shinzo Abe calificó de viles las amenazas de EI y pidió ayuda a Jordania para liberar a Goto.
"Ante esta situación extremadamente grave, el gobierno ha solicitado su cooperación al de Jordania para la pronta liberación de Goto", dijo Abe.
"Son amenazas completamente viles y siento una profunda indignación", dijo el primer ministro japonés, Shinzo Abe, al término de una breve reunión del gobierno.
El miércoles, los padres de ambos rehenes se dirigieron a las autoridades niponas y jordanas pidiéndoles que hagan todo lo posible para salvar la vida de sus hijos.
"Señor primer ministro, se lo ruego, salve la vida de Kenji, continúe negociando con el gobierno de Jordania", suplicó en Tokio la madre de Goto, Junko Ishido.
"Reclamamos el regreso de Maaz. Tenemos una única demanda, la vuelta de Maaz a cualquier precio", dijo su padre, Safi el Kasasbeh, en una manifestación de decenas de miembros de tribus de Karak (sur), de donde es oriundo el piloto.
"Todos somos Maaz", se leía en fotografías del rehén que agitaban los manifestantes, entre los que se encontraba la madre del piloto.
Al supeditar la vida del segundo rehén japonés a la liberación de la kamikaze iraquí, el EI desplazó a Ammán el centro de la negociación, poniendo a la diplomacia japonesa en una situación delicada.
Jordania se encuentra ante un difícil dilema: liberar o no a la kamikaze Sajida al Rishawi para salvar a los rehenes.
El tema es complejo puesto que una eventual liberación de la prisionera iraquí suscitaría una gran indignación entre la población jordana, según un especialista.
'Un ultimátum apremiante'
Las nuevas exigencias del EI se presentan bajo la forma de una imagen de Goto sosteniendo la foto del piloto jordano, con la supuesta voz del japonés formulando las amenazas de sus secuestradores.
Goto, un periodista independiente, fue capturado probablemente entre fines de octubre y principios de noviembre, mientras que Al Kasasbeh lo fue el 24 de diciembre, después de que se estrellara su F-16 en una zona de Siria.
En un vídeo difundido el 20 de enero, el EI reclamaba al gobierno japonés un rescate de 200 millones de dólares en 72 horas para liberar a Goto y a otro rehén japonés, Haruna Yukawa. El grupo anunció el sábado haber ejecutado a Yukawa, ya que no se cumplieron sus peticiones. Posteriormente añadió la reivindicación de la liberación de la prisionera iraquí.