La última estatua pública de Lenin que quedaba en Finlandia fue desmantelada este martes en una ciudad del sureste del país, que ha ido retirando los monumentos relacionados con la Unión Soviética desde que Rusia inició la invasión de Ucrania el pasado febrero.
Decenas de personas asistieron a la retirada del monumento, en la ciudad de Kotka, algunas con champán. Un hombre se manifestó en contra de la medida, portando una bandera soviética. El monumento representaba a Lenin en actitud pensativa, con la mano sobre la mejilla, y fue donada a Kotka en 1979 por la ciudad estonia de Tallinn, entonces integrada en la Unión Soviética.
"Quitar de las calles la estatua del fundador de uno de los regímenes más brutales del mundo, el comunismo soviético, es algo grande", declaró Matti Leikkonen, de 77 años.
Según Markku Hannonen, un responsable del ayuntamiento de Kotka, muchos habitantes "apreciaban" la estatua, o al menos la veían como algo "familiar", pero también hubo quien pidió que fuera retirada "porque refleja un periodo de represión de la historia finlandesa.
Después de dos conflictos contra la Unión Soviética durante la Segunda Guerra Mundial, Finlandia aceptó un estatus de neutralidad durante la Guerra Fría, a cambio de garantías de que nunca sería invadida de nuevo por Moscú.
En abril, la ciudad de Turku (al suroeste del país) retiró un busto de Lenin que había en el centro de la ciudad, a raíz de la invasión de Ucrania. Y en agosto, la capital Helsinki desmontó una estatua de bronce llamada "Paz Mundial" que había sido regalada por Moscú en 1990.
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