Desde hace años, Issa Anis Kassissieh, se caracteriza como santa Claus en Jerusalén, para llevar esta tradición tan Americana en tierra Santa, algo que afirma no dejará de hacer a pesar de la pandemia del covid-19.
“En realidad, pase lo que pase, sigo mi carrera como Papá Noel porque para mí es muy importante porque hay que darles un mensaje positivo a los niños de todo el mundo, con este covid-19, que es mundial, tenemos que darles alegría y amor y un buen mensaje”, afirmó este hombre que se caracteriza para representar a la comunidad cristiana que vive en Jerusalén, la cual llega hasta los 15 mil habitantes.
El afirma que a pesar de la pandemia sigue llevando a menores a que conozcan su lugar de trabajo, la fábrica de santa Claus, ya que tanto él como las personas que le ayudan, así como los niños respetan todas las medidas, por lo que la magia de las fiestas no tienen por qué perderse
“La mejor parte de mi trabajo es vestirme como santa para llevar alegría y paz a los niños de toda la tierra y del mundo. Es algo mágico para mí ya que la Navidad para mí como Papá Noel también es para dar cariño, es un mensaje que le doy desde aquí al mundo a todos los niños”, dijo.
Él sale a las calles, saluda a todos y muestra el espíritu navideño en Jerusalén, la cual no es solo el 24 y 25 de diciembre, ya que se respeta la navidad griega ortodoxa que es el 6 y 7 de enero y la Armenia que es el 18 y 19 de enero.
Issa Anis Kassissieh, cuenta que su lugar de trabajo tiene cientos de años más que él y que incluso generaciones atrás ya disfrutaban de esta tradición, la cual se convierte en una tradición con o sin covid
“Cuando vienen los niños les muestro mi taller. Y también tengo mi oficina, escribo para ellos, para cada niño, certificados de niños buenos, todo el año, y están orgullosos de que estén en la lista de buenos. Incluso el año pasado, con covid-19, tuvimos 14 mil niños que vinieron a mi casa”, dijo con orgullo.
KGE