Para avanzar en la inclusión femenina en el mundo laboral es necesario hacer un programa permanente de respeto de valores, comunicación activa y eliminación de “estigmas sociales” con el objetivo de dar oportunidades equitativas a mujeres y hombres en la ciencia, y tecnología.
En entrevista con MILENIO, el Director de Personas y Organización de Braskem Idesa, Yordan Nadav aseguró que en la petroquímica como en otros sectores donde las mujeres son erróneamente “minimizadas” debe de haber una transformación de fondo y forma que incluya capacitaciones permanentes y diálogo abierto para aceptar la diversidad de opiniones e ideas en una organización.
“Con esto vamos a poder quitar estas barreras que nos hacen creer que puede haber una actividad que puede estar mejor desempeñada por un hombre que por una mujer, me pareciese que debe de existir igualdad en ese sentido”, abundó.
Además, indicó que como lo ha realizado en Braskem Idesa, se deben de fortalecer desde el interior de la organización, la aplicación de valores como la empatía y el respeto, así como la sensibilización entre los actores internos y externos como los empleados, proveedores, compañías competidoras y clientes.
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“No creo que el primer camino para tratar el tema sea el castigo, se debe de sensibilizar y capacitar a las personas con mucha resiliencia y empatía dentro de las organizaciones; manejo de valores. Nosotros lo hemos amarrado en nuestra estructura diaria, dentro de nuestro código de conducta, y de ética, de administración laboral”
“Pero tenemos que ser honestos en las actividades que decimos y las que llevamos a la realidad para que no se quede en un papel, que guardemos esta congruencia, sino que realmente lo vivamos, que cuando tengamos las oportunidades, que las demos para todos, hombres y mujeres”, destacó.
Nadav recomendó a los representantes de la Iniciativa Privada, fomentar “una terna diversa” en los campos laborales donde dentro de las responsabilidades con la sociedad civil se encuentren asegurar “los mecanismos para que no haya discriminación”, en el que la parte lógica y creativa siempre tenga participación de las mujeres para tener “diferentes formas de ver las cosas”.
“En algún momento creo que evolucionemos para que cuando estemos en ese posicionamiento y no preguntemos la edad o el género sino que nos enfoquemos en las competencias que la persona puede aportar a la compañía”.
“No es apoyarlas solo en marzo, no vamos avanzar si hacemos un esfuerzo único. Debe de ser un programa permanente de las compañías que sea parte estratégica para poder hacer algo a lo largo del año. Es fomentar la unión entre todos los integrantes de la empresa”, precisó.