Boeing reconoció que sus aviones 737 MAX, en tierra desde dos accidentes que dejaron 346 muertos, no volverán a los cielos hasta 2020, después de que el regulador aéreo estadunidense le pidiera a la compañía aeronáutica que fuera realista sobre la situación de esas aeronaves.
El jefe de la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA), Steve Dickson, se reunió con el director ejecutivo de Boeing, Dennis Muilenburg, con el que compartió su impresión de que la compañía está precipitándose para que los 737 MAX vuelvan a volar, según el regulador.
La FAA ha dejado claro que quiere una revisión rigurosa de ese modelo, cuyo uso se prohibió hace nueve meses, a raíz de los accidentes que protagonizó en octubre de 2018 y en marzo de 2019.
Boeing había dicho varias veces que esperaba conseguir el visto bueno para un regreso del 737 MAX antes de 2020.
Pero después del encuentro de este jueves publicó un comunicado en el que indicó que trabajará con la FAA para "cumplir con sus requisitos y sus plazos" y que actuará para un regreso seguro de ese modelo al servicio en 2020.
Antes del encuentro entre Dickson y Muilenburg, el jefe de la FAA envió un correo electrónico a los comités de transporte aéreo del Congreso en el que se mostró preocupado porque Boeing seguía "un calendario de retorno al servicio poco realista considerando los repetidos retrasos por varias razones".
Según la misiva, Dickson temía además "que algunas de las posiciones públicas" de Boeing dieran "la impresión de querer obligar a la FAA a actuar más rápidamente".
El dirigente del regulador aéreo había afirmado el miércoles que el 737 MAX, el avión insignia de Boeing, no volvería a volar antes de 2020.
Las múltiples investigaciones llevadas a cabo por las autoridades de aviación en Indonesia, donde un Boeing 737 MAX de Lion Air se estrelló en octubre de 2018, así como en Etiopía, después del accidente de Ethiopian Airlines en marzo, apuntan a un fallo del sistema de estabilización MCAS de este modelo.
MRA