Las autoridades de regulación ambiental de Estados Unidos anunciaron hoy la aprobación de modificaciones para los últimos automóviles diésel Volkswagen que se venden en el país equipados con un software que les permitía manipular las pruebas de emisiones de gases contaminantes.
La Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) y la Junta de Recursos del Aire en California (CARB, por sus siglas en inglés) emitieron un comunicado conjunto indicando que se había dado luz verde a las modificaciones de los autos restantes con motores 3.0.
Volkswagen admitió en 2015 haber instalado este sistema de software en casi 11 millones de vehículos diésel. El escándalo involucró a automóviles VW, Audi y Porsche.
"Este ha sido un largo camino", dijo la presidenta de CARB, Mary D Nichols. "La mitigación del daño de estos vehículos llevará años".
Sólo en California, se estima que los automóviles diésel han liberado miles de toneladas de óxido de nitrógeno en exceso, un contaminante que puede empeorar los efectos de enfermedades cardiovasculares, asma y otros problemas respiratorios.
El costo total para la compañía en concepto de indemnización y sanciones en América del Norte fue de más de 29 mil millones de dólares. Parte de ese dinero puede recuperarse si VW logra revender automóviles modificados que han sido devueltos.
Los abogados en Alemania y otros países europeos están tratando de obtener reclamaciones de daños de VW en nombre de los propietarios de vehículos diésel, pero hasta ahora han obtenido un éxito limitado.
CPR