El gobierno busca formas de evitar que los millones de británicos a quienes se les prometió la semana pasada vacaciones en los préstamos se les emitan cartas amenazadoras de los bancos para que paguen sus deudas.
El jueves pasado, el principal regulador financiero de Reino Unido anunció medidas para aliviar la presión financiera sobre los hogares en medio de la crisis por coronavirus, pero los bancos y los grupos comerciales de la industria dijeron que con las “anticuadas” leyes de crédito al consumo se corre el riesgo de crear una enorme confusión entre los solicitantes de préstamos que buscan aprovechar lo que se ofrece.
La Autoridad de Conducta Financiera de Reino Unido (FCA, por su sigla en inglés) propuso un congelamiento en los pagos de préstamos y tarjetas de crédito por tres meses —más sobregiros sin intereses— y le dio a los bancos y otras instituciones financieras hasta hoy para responder a sus planes. Si se aceptan, entrarán en vigor el 9 de abril.
En virtud de la Ley de Crédito al Consumidor de 1974, la modificación de los contratos de préstamo entre los bancos y sus clientes consume mucho tiempo para ambas partes y puede crear complicaciones, como la necesidad de nuevas evaluaciones de asequibilidad por parte de los bancos, que son casi imposibles de juzgar en este momento debido al impacto del virus.
Por lo tanto, la FCA espera que los bancos se contengan sin cambiar los contratos subyacentes de la mayoría de los clientes.
Sin embargo, ofrecer alivio de esta manera activará las cartas de los bancos a los clientes después de dos meses en las que se les exija el pago de sus deudas porque técnicamente se habrán atrasado en los pagos, a pesar de que las vacaciones sobre el préstamo se acordaron por adelantado.
“Va a parecer que los bancos se han vuelto locos”, dijo un abogado que trabaja con prestamistas sobre cómo abordar el problema. “Si pensabas que todo estaba bien durante tres meses, entonces dos meses después te dicen que estás atrasado y necesitas contactar al banco, es horrible (para los clientes)”.
La FCA no tiene el poder de solucionar el problema porque las normas sobre los atrasos se establecen en la Ley de Crédito al Consumidor.
Adrian Dally, jefe de finanzas automotrices de la Asociación de Finanzas y Arrendamiento, un organismo comercial de la industria, dijo: “Desde hace tiempo hemos dicho que la legislación es muy anticuada y necesita modernizarse; no es adecuada para el siglo XXI”.
El Departamento del Tesoro es consciente del riesgo de que la propuesta de vacaciones sobre los préstamos provoque que los bancos emitan a los clientes cartas de demora de pagos debido a los requisitos de la ley.
Pero encontrar una solución es complicado dado que el parlamento está suspendido al menos hasta el 21 de abril, lo que dificulta la actualización de la legislación.
Un portavoz del Tesoro dijo: “Damos la bienvenida a la medida de la FCA para ayudar a las personas que necesitan apoyo con sus tarjetas de crédito, préstamos y sobregiros durante este momento difícil, y estamos trabajando con ellos para considerar cómo se puede hacer esto de manera más efectiva”.
La FCA reconoció el problema en su orientación a los bancos y otras instituciones financieras la semana pasada, instándoles a proporcionar “explicaciones o contextos adecuados” dentro de las cartas de demora de pagos si les preocupa que causarán “confusión”.
Sin embargo, los bancos señalaron que es difícil ofrecer ese contexto para tranquilizar a los clientes, ya que gran parte de la redacción de los avisos de retrasos de pagos está establecida por ley.
Si los bancos no envían cartas redactadas adecuadamente sobre las demoras de pago de los préstamos, las deudas se vuelven legalmente inaplicables.
La FCA no hizo comentarios sobre posibles formas de evitar que los solicitantes de préstamos que se encuentran con legítimas vacaciones sobre los préstamos reciban las cartas de retrasos de pagos por parte de los bancos.
Pero una persona familiarizada con el problema sugirió que se puede buscar que las cartas contengan un contexto con explicación.
“No es que la FCA no vea la necesidad de impedir que se envíen avisos legales (sobre atrasos en los préstamos)”, dijo la persona. “Sin embargo, este es el enfoque sugerido por el momento”.
La propuesta
La propuesta de la Autoridad de Conducta Financiera pide congelar los vencimientos de préstamos y tarjetas de crédito por tres meses, además de cancelar los cargos por números rojos.
Conmoción
Christopher Woolard, jefe en funciones de la FCA, señaló que el virus ha “causado una conmoción financiera sin precedentes con consecuencias para los consumidores de Reino Unido”.
Más apoyo
El grupo británico UK Finance considera que las medidas presupuestas por el regulador “deberán permitir a los prestamistas dar más apoyo a sus clientes”.