La emergencia sanitaria por la pandemia de covid-19 transformó la vida cotidiana alrededor del mundo: impulsó el desarrollo de nuevas modalidades de consumo, educación e incluso, la forma de trabajo.
Esta rápida adopción, que tenía como base el uso de herramientas digitales, hizo que las autoridades mexicanas voltearan hacia dicha modalidad y comenzaran a sentar las bases para una regulación que estuviera enfocada en proteger las necesidades y la seguridad del sector laboral del país, incluso si no se encontraban en oficinas.
Así, el 5 de diciembre de 2023 entró en vigor la Norma Oficial Mexicana (NOM 037), enfocadas en encontrar un equilibrio para las personas que se encuentran bajo dicho esquema laboral, una modalidad que sin embargo, no alcanzará para la mayoría de los trabajadores.
“Las personas trabajadoras bajo la modalidad de Teletrabajo pueden beneficiarse al mejorar el equilibrio entre el trabajo y la familia, lo que puede conducir a una mayor motivación y una menor rotación, así como a una mayor productividad y beneficios tanto para la persona trabajadora bajo la modalidad de Teletrabajo como para el patrón, y una reducción en la necesidad de espacio de oficina y los costos asociados”, indica el documento publicado en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
En 2021, la consultora KPMG estimaba que seis de cada 10 firmas que habían empleado la modalidad de trabajo remoto a raíz de la pandemia, mantendría esta modalidad una vez que terminara la emergencia sanitaria.
De acuerdo con los resultados de la firma, cerca de 40 por ciento de las compañías entrevistadas aseguró que entre 26 y 50 por ciento de su plantilla laboral se mantendría bajo dicha forma de trabajo.
De los encuestados, 91 por ciento aseguró que sus colaboradores se mantendrían trabajando dos o más días a la semana de forma remota.
Sin embargo, alrededor de 56 por ciento por ciento de los colaboradores sostuvo que no había un equilibrio entre las actividades personales y laborales dentro del esquema home office. Es en este panorama que surgió la regulación que ya está en vigor.
La NOM 037 indica que aquellas personas en los que más de 40 por ciento de la jornada laboral sea vía remota, deberán contar con:
- Horas establecidas de inicio y término de actividades.
- Tener disponibilidad de conectividad para el uso y manejo de las Tecnologías de la Información y Comunicación, proporcionado por el empleador.
- Asegurar condiciones de seguridad y salud en el sitio de trabajo (como buen estado de las instalaciones eléctrica; con iluminación, ventilación y condiciones ergonómicas).
- Tener un lugar de trabajo convenido y fijo.
- Contar con mecanismos de difusión y comunicación necesarios, entre otros.
La consultora Manpower Group señala que uno de los retos será cómo se transforma el trabajo híbrido, tras la implementación de la regulación y las propias solicitudes del sector laboral frente a los trabajos flexibles.
Sostiene que entre las principales razones para trabajar desde la oficina se encuentra el incremento de la interacción social (39 por ciento de los consultados) y una colaboración más eficiente (26 por ciento).
“No hay nada estipulado aún, ya existen algunos cuestionarios que se tienen que documentar para aquellas organizaciones que trabajan en este esquema, pero pocas organizaciones están migrando hoy en día a un esquema 100 por ciento de teletrabajo; hoy vemos que estamos en modalidades híbridas donde la mayor parte de tiempo se vive la cultura organizacional hacia el interior de las empresas”, dijo al respecto José Luis Aguilera, líder de right Management de Manpower Group.
La firma indica que alrededor de ocho de cada 10 trabajadores no le gustaría permanecer tiempo completo en la oficina y que 50 por ciento prefiere el trabajo híbrido, debido a que representa mayor flexibilidad para sus actividades.
“Es en este sentido la toma de la decisión de las organizaciones de traer a los colaboradores hacia la presencialidad en lugar de un esquema 100 por ciento en teletrabajo”, indicó Aguilera. A ello se añade la naturaleza de actividades de las propias compañías y los departamentos que abarquen.
¿Cuántas personas se beneficiarán de la NOM 037?
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) indica que a octubre de 2023, la Población Económicamente Activa (PEA) del país alcanzó las 61.1 millones de personas; de dicha cifra, 59.4 millones (97.3 por ciento) estuvieron ocupadas.
En tanto, la población desocupada sumó 1.7 millones de personas (2.7 por ciento de la PEA).
Del total de personas ocupadas, 40.6 millones (68.4 por ciento) fueron trabajadores subordinados y remunerados; 13.5 millones, trabajaron de manera independiente o por su cuenta sin contratar empleadas o empleados; 3.1 millones refirieron ser patronas, patrones o empleadores; y 2.2 millones, se desempeñaron en los negocios o en las parcelas familiares.
Ante estas cifras, es preciso analizar el tipo de trabajo que realizan dichos colaboradores; según la ENOE:
- En servicios, se concentraron 49.3 por ciento de los trabajadores.
- Comercio, 19.8 por ciento.
- Industria manufacturera, 15.6 por ciento.
- Actividades agropecuarias, 11.3 por ciento.
- Construcción, 8.1 por ciento.
- Otras actividades económicas (como minería, electricidad, agua y suministro de gas), 0.7 por ciento.
“Durante la pandemia, sólo en Latinoamérica el 3 y 5 por ciento del total de la fuerza laboral pudo trabajar bajo esquemas de Home office. El país que más obtuvo el beneficio del trabajo en casa no llega ni a 5 por ciento; nuestra economía está basada en las Pequeñas y Medianas Empresas (Pymes) que todos los días tienen que salir a la calle. Hacemos mucho foco en Home office cuando realmente es muy poca la proporcionalidad”, destacó Alberto Alesi, director general de Manpower Group para México, Caribe y Centroamérica.
De hecho, en 2020 la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) sostuvo que el país se encontraba entre las cinco naciones de la región con menos posibilidades para que sus trabajadores tuvieran acceso a la modalidad de trabajo remoto, con un promedio estimado entre 15 y 20 por ciento, cuando la media para la región era de 21.3 por ciento.
Por su parte, la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) considera que la NOM 037 podría impactar a cerca de 4.3 millones de personas, es decir, 10.5 por ciento de la población ocupada.
La cifra dista mucho de la realidad de países de Europa o en Estados Unidos, donde la Cepal estima que hasta 40 por ciento de los empleados podrían tener la posibilidad de contar con estos esquemas.
La informalidad laboral es otro de los temas que enfrenta el sector en el país: 32.9 millones de personas trabajan en este segmento, lo que representa 55.4 por ciento de las personas ocupadas en México. Así, las firmas se enfrentan al reto de encontrar otro tipo de mecanismos orientados a retener a su talento.
“La NOM 037 busca de alguna manera trasladar los beneficios que tendrían que tener los colaboradores que están haciendo trabajo desde casa, pero estamos viendo que las organizaciones están viendo un horario establecido. Hay mucho de lo que hemos platicado desde el sector privado. Las organizaciones están buscando darle sentido a este tipo de jornadas flexibles”, indicó Alesi.
De acuerdo con el especialista de Manpower, el tema laboral se está centrando en los tipos de beneficios que se pueden ofrecer a los colaboradores.
Así, aseguró que en plantas industriales, donde los incentivos del trabajo remoto aplican sólo para áreas como la administrativa, las firmas están viendo qué se puede dar a las familias de los trabajadores para buscar integración, dotar de guarderías y otro tipo de servicios que aseguró, se verán con mayor fuerza.
CMOG