HR Ratings ratificó la calificación de la emisión de Gissa 17 de Grupo Industrial Saltillo con perspectiva estable, a pesar de que los ingresos y la generación de Ebitda se mostraron por debajo de las estimaciones a partir de la venta de Calorex.
Los analistas comentaron que, pese a lo anterior, los recursos obtenidos en dicha transacción fueron destinados parcialmente al prepago de pasivos, por lo cual los niveles de endeudamiento disminuyeron, inclusive a niveles por debajo de lo esperado.
En un reporte emitido a la Bolsa Mexicana de Valores (BMV), la calificadora refirió que la empresa realizó el refinanciamiento de un crédito sindicado denominado en dólares, con lo cual extendió el calendario de amortizaciones y extendió la vida promedio ponderada de la deuda a aproximadamente 6.3 años contra los 5.4 años que tenía al tercer trimestre del 2018.
La emisión Gissa 17 se colocó el pasado 19 de octubre de 2017, por un monto de mil 375 millones de pesos y con vencimiento el 7 de octubre de 2027.
Los analistas señalaron que la generación de FLE (Flujo Libre de Efectivo) mostró altos niveles, alcanzando mil 247 millones de pesos, los cuales fueron superiores al escenario base de mil 234 millones de pesos.
Asimismo, la deuda neta al tercer trimestre del 2019 disminuyó 30.6 por ciento, al cerrar en 4 mil 529 millones de pesos, lo cual fue producto del prepago de una parte del crédito sindicado, así como de la GISSA 17-2 con recursos provenientes de la reciente venta de Calorex.
La estructura de deuda al tercer trimestre de 2019 se mostró 97.5 por ciento de largo plazo contra el 96.1 por ciento al tercer trimestre del 2018. Adicional a la reducción de pasivos, la empresa firmó un nuevo contrato de crédito sindicado en dólares para refinanciar el anterior.