El presidente desde hace mucho tiempo de la compañía Emirates de Dubái, sir Tim Clark, se va a retirar el próximo año, con lo que marca un año de transición para la línea aérea más grande de Medio Oriente.
El jeque Ahmed bin Saeed Al Maktoum, presidente de la firma, anunció en un memorando interno que el incondicional expatriado británico dejaría el cargo a mediados de junio, de acuerdo con un portavoz de la aerolínea. Sir Tim, quien fue ascendido a presidente en 2003, seguirá siendo asesor.
Las personas con información dentro de la compañía dicen que entre los candidatos para su reemplazo se encuentran Adel Al Redha, el director de operaciones de la aerolínea propiedad del gobierno, y Ghaith Al Ghaith, director ejecutivo de la aerolínea de bajo costo hermana de Emirates, Flydubai.
Al unirse al equipo fundador de la aerolínea en 1985 procedente de Gulf Air, con sede en Bahrein, el ejecutivo de 70 años desempeñó un papel fundamental en su transformación para convertirse en un gigante mundial de la industria.
Dubai, que anteriormente era atendida principalmente por Gulf Air, se lanzó por su cuenta con la inauguración de su propia aerolínea, iniciando la expansión del emirato de ser un puerto comercial a convertirse en la capital comercial y turística de la región.
Utilizando la ciudad como centro, la aerolínea creció rápidamente al conectar al emirato con una zona más amplia del Medio Oriente y con Europa, Asia y el continente americano, actuando como un motor simbiótico en el desarrollo de su base de operaciones.
A raíz de la disrupción de la aviación mundial después de los ataques terroristas del 11 de septiembre de 2001, Emirates apostó por su modelo de “supercentro" al colocar lo que en ese momento fue el pedido de aviones más grande en el Salón Internacional de la Aeronáutica y del Espacio de París de 2003.
El desarrollo de rutas entre las “ciudades pares” emergentes generó ingresos, ya que se aprovechó de la creciente demanda de viajes de destinos como China y África.
Durante años sir Tim tuvo que refutar las críticas de los competidores internacionales que afirman que el gobierno de Dubai subsidió a Emirates. Desde el desplome de los precios del petróleo en 2014, también dirigió a la aerolínea a través de un periodo difícil, ya que tuvo que luchar con una menor demanda de viajes regionales junto con las disrupciones geopolíticas en el Medio Oriente y más allá.
No obstante, Emirates hizo pedidos con un valor de alrededor de 25 mil millones de dólares en el Salón Aeronáutico de Dubai del mes pasado para ampliar su flota de aviones de fuselaje ancho. En el la feria, sir Tim dijo que la introducción de diferentes aviones permitiría a Emirates presentar nuevos destinos, impulsando la siguiente fase de su crecimiento.
Las condiciones económicas predominantes -desde la agitación en Hong Kong hasta las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China y el Brexit- tuvieron un impacto en la industria de la aviación, dijo a los periodistas.
El año que viene seguirá siendo difícil, dijo, pero “para 2021 lo vamos a superar y la economía mundial será más fuerte”.