Por: Paloma Merodio Gómez y Andrea Ramírez Santiago
Ilustración: Patricio Betteo, cortesía de Nexos
Debido a que no cuentan con servicios básicos, las personas que habitan en estas zonas se ven limitadas en el cumplimiento adecuado de las medidas para prevenir la propagación del covid-19. Al no contar con una dotación diaria de agua, no le es posible a la población lavarse las manos con la frecuencia requerida. Por otro lado, una alta densidad poblacional hace más difícil cumplir con la sana distancia. Además, una característica común de la población en estas zonas es su ocupación en el sector informal, generalmente con bajos salarios y con una baja capacidad de ahorro, lo cual les impide ausentarse de sus labores para cumplir con el confinamiento.
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