Vaya año el que hoy termina. Lleno de información para los que nos dedicamos a contar el día a día.
Volver en febrero a Acapulco, después de unos meses del paso de Otis, y ver cómo iba su recuperación provocó enorme entusiasmo en nuestra audiencia. A pesar de los pendientes, el puerto estaba de nuevo en pie. Lamentablemente, la violencia y el paso de John han retrasado su recuperación.
Ciudad Juárez nos recibió en marzo con un triste memorial para los 40 migrantes muertos por el incendio en la estación migratoria del INM, que por negligente no paró el fuego y sacó de inmediato a quienes se quemaron.
Este año, los procesos electorales en México y Estados Unidos acapararon buena parte de las coberturas y recorridos por ambos países. Arranque y cierre de campañas, debates presidenciales, convenciones partidistas y los días de la elección permitieron tomar el pulso de lo que estaba ocurriendo.
Con las entrevistas con las y el candidato en México supe que Gálvez se sentía sola y visualizaba la derrota, Sheinbaum asumió el protagonismo y disfrutaba la cercanía con la gente que heredó de AMLO y el candidato de MC la pasaba a toda Máynez.
Otra gran experiencia fue acudir a los primeros días de los Juegos Olímpicos de París. Qué orgullo encontrar historias de mexicanos que la rompieron allá: un arquitecto que participó en la reconstrucción de Notre Dame, un chef con estrella Michelin, una emprendedora que cosecha chiles para hacer salsa mexicana, una bailarina que enseña ballet folklórico, un artesano de café mexicano, etcétera.
En El Salvador, entrar y pasar una noche en la cárcel de máxima seguridad me dejó con pesadillas varios días, pero la experiencia de conocer ese lugar valió la pena.
Detrás de cada una de esas coberturas hay un esfuerzo impresionante del equipo de trabajo que me acompaña en campo o a distancia; la empresa, dueños y jefes, que apoyan las aventuras periodísticas en las que me meto; y la familia, que son quienes sacrifican más, sobre todo, el tiempo juntos.
El aprendizaje personal, combinado con el valor de las cosas a la distancia y, en ocasiones, la impotencia de no poder estar en dos lugares al mismo tiempo, fueron sentimientos que se mezclaron este 2024 para poder hacer lo que más me gusta.
Que el 2025 sea un gran año para todos.
Aquí tendrán el #RecuentoDeLosDaños cada martes.