Vivimos en medio de una era, en la que nadie se escapa de las redes sociales, y sobre todo del internet, que prácticamente se ha convertido en un Ciber-Estado, con reglas propias, y vidas paralelas.
Y mientras los avances tecnológicos, son cada vez más frecuentes, y transcurren a una gran velocidad, el andamiaje jurídico se observa lento y desfasado.
En la actualidad, la sociedad, real o virtual, esta ávida de show, morbo y espectáculos, que en el fondo denotan el vacío en el que viven, buscando alivio a sus vidas vacías y miserables, a través de la desgracia, calumnias o la humillación de otras personas.
Gracias (o no) a las redes sociales, hoy día nos enteramos en tiempo real, de cuando inicia una relación, o de cuando acaba.
Es aquí donde las rupturas en las relaciones violentas, encuentran un canal de salida, al utilizar las redes sociales como una herramienta para ser empleadas como cibervenganza, es decir, utilizar las tecnologías de información para buscar afectar la imagen, reputación, prestigio, de la otra persona.
Claramente este tipo de conductas y perfiles, denota la degradación en que vive una persona, cuya conducta violenta la viraliza (en redes).
Hay personas que no entienden que una relación acabo y punto. Al contrario, buscan mantener una relación, aunque sea ficticia, basada en el acoso.
A VECES UNA RELACIÓN TERMINA, PERO LA VIOLENCIA CONTINÚA: ¿QUÉ ES LA CIBERVENGANZA?
La cibervenganza la podemos definir como aquellas conductas que se realizan utilizando los medios cibernéticos (internet, redes sociales, etc.) en las cuales una persona o grupo de personas, buscan “desquitarse”, en respuesta a una mala conducta, acción (no necesariamente justicia), es una acción injuriosa, es decir, la cibervenganza no busca la reparación del daño, solo lastimar, ofender o denigrar.
Por ello, encontramos en las redes sociales a personas que, a través del mundo cibernético, están constantemente acosando, ya sea escribiendo mal de una persona, ofendiendo, haciendo memes, o enviando correos, para ello utilizan las diferentes redes sociales y hasta crean diferentes perfiles.
Generalmente utilizan un lenguaje grosero y ofensivo. También les gusta al subir contenidos degradantes.
La cibervenganza no solo es por amor, también puede ser por cuestiones escolares (cuando alguien reprueba), cosas de familia, de amistades, de conflictos o rivalidades, así como por asuntos laborales, religioso o políticos.
CIBERVENGANZA SEXUAL O PORNOVENGANZA
La Pornovenganza es toda aquella publicación y divulgación por Internet de videos o fotos con un contenido sexual, tomadas con o sin consentimiento de la (ex)pareja. Su difusión es con el objetivo de que se hagan virales, para causar un mayor daño a la persona.
Con esto, el victimario busca causar un daño a su imagen, reputación, a la dignidad, así como psicológicos.
Hay casos en todo el mundo de personas, sobre todo mujeres víctimas de la pornovenganza, que han llegado al suicidio, como el caso de una joven en Italia, que se suicidio tras la cibervenganza, cuando su exnovio subió un video al internet, cuando ella le practicaba sexo oral.
Si bien no podemos hablar de cifras exactas, lo cierto es que este tipo de conductas violentas van en aumento, y se debe poner un freno de inmediato, tanto cultural como legal, para evitar que las personas que recuren al ciberbullying (ciberviolencia), queden en la impunidad, ya que hay veces que el daño puede ser irreparable.
¿CÓMO EVITAR LA CIBERVENGANZA?
Cada quien su contraseña: Lo más importante es que en una relación existan los limites, esto significa, que cada quien respete su espacio, físico y virtual. Cada quien decide que sube, que comparte que escribe. Entregar tus contraseñas no es signo de amor, sino de violencia, la confianza no está en tener acceso a la vida privada.
Doble autentificación. Puedes solicitar en tus redes, la autenticación de doble, es decir que, si alguien quiere abrir tu cuenta, te avisan, ya que incluye una contraseña y un mensaje enviado por SMS o email.
Fotos “Nudes” o desnudos. Lo mejor es no enviarlo, y si lo haces, es necesario utilizar mensajería encriptada. Recuerda que hoy, todo queda en el mundo virtual.
Privacidad en redes sociales: Agrega filtros de ser necesario, decide quién puede acceder a tus publicaciones.
Denuncia la cibervenganza. Debido a que esta conducta va en aumento y puede generar lesiones graves a una persona, es necesario que toda conducta que atente contra la dignidad de cada persona, sea denunciada a las autoridades, máxime cuando una alguien denosté, agreda a una persona, o divulgue información no destinada a ser publica, aunque se la hayan enviado.
Monitorear a las niños, niños y adolescentes. Las personas adultas deben estar monitoreando lo que ocurre en las redes sociales, para evitar que puedan ser víctimas de ciberacoso, sea entre pares o hasta acoso sexual.
Muchas víctimas no denuncian, por la falta de apoyo o dialogo de los padres y de las madres.
Es importante dialogar permanentemente con ellos de estos temas.
DONDE DENUNCIAR.
Policía Cibernética de la Comisión Nacional de Seguridad: teléfono 088, opera las 24 horas del día, los 365 días del año. Twitter @CEAC_CNS
Correo: ceac@cns.gob.mx
Policía Cibernética en la Ciudad de México: policia.cibernetica@ssp.df.gob.mx @UCS_CDMX
El amor no se mide con likes, o corazones o caritas tristes. El amor se vive y disfruta.
Twitter: @alfreduam
alfreduam@yahoo.com.mx
FB: Alfredo Alcala Montaño
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