Que ayer la gobernadora Libia García anunció que prepara lo que será la política anticorrupción y de transparencia proactiva de su gobierno que aseguró muy pronto estará presentando para lo cual tuvo dos reuniones, la primera de ellas con Mariela Huerta, presidenta del instituto de transparencia de la entidad.
Nos cuentan que todo es cosa de que se aprueben las leyes secundarias para determinar si cada entidad federativa tiene la libertad de mantener a los institutos locales o de plano absorber las funciones de éstos que en este caso le tocaría a la Secretaría de la Honestidad.
Que por cierto al cierre de la jornada, la mandataria dio a conocer mediante sus redes sociales otra reunión en el mismo sentido con la titular de la dependencia aquí mencionada Arcelia González. Recordemos que la gobernadora fue impulsora del Sistema Estatal Anticorrupción lo que la hace conocedora del tema.
Por cierto un sistema que en estos momentos se encuentra sin Secretario Técnico y con un muy cuestionado Comité de Participación Ciudadana que tiene una vara muy alta y un desempeño poco menos que insuficiente en un escenario complejo ante la desaparición de los organismos autónomos.
Que otra reunión que sostuvo la gobernadora fue con el dirigente nacional de su partido, Jorge Romero Herrera, encuentro que se torna interesante ahora que la dirigencia estatal de Acción Nacional está en medio de un litigio con la impugnación de la sentencia del Tribunal Electoral de Guanajuato que ordenó reponer la convocatoria del proceso interno.
El líder panista expresó que comparten la misma pasión por fortalecer al PAN y trabajar por un México mejor además que “Su liderazgo y compromiso son inspiración para todos los que creemos en la unidad como motor del cambio”, lo que habla de un respaldo total del líder albiazul a la mandataria.