Que la espera ha terminado. Para Claudia Sheinbaum y Pablo Lemus, el momento es ahora. Y para la Federación y Jalisco, esto significa un futuro brillante. La presidenta dio el pistoletazo de salida para que Marcelo Ebrard creara el primer faro de economía en Guadalajara, y Lemus ha sido escuchado por Ebrard en un encuentro privado que superó todas las expectativas, pues iban por 20 minutos y se alargaron por una hora y media. Su proyecto de cinco ejes es el detonante que impulsará el desarrollo de una nueva región en América del Norte. Este ambicioso plan contempla la creación de centros de desarrollo de semiconductores y operaciones de tecnología de la información, lo que convertirá a Guadalajara en un polo tecnológico de primer nivel. Pero eso no es todo. El proyecto también incluye una reingeniería en turismo, entretenimiento y desarrollo de la industria cinematográfica que permitirá potenciar el patrimonio cultural y natural de la región, atraer a más visitantes y generar empleos y oportunidades para la comunidad local. Es un modelo de desarrollo sostenible y equitativo para toda la región.
Que Sheinbaum y Ebrard son visionarios que entienden la reconfiguración del mundo. Pero, ¿a qué costo? Detrás de cada movimiento político, hay alguien que gana terreno. En este caso, es el rector Ricardo Villanueva Lomelí, el anfitrión del evento y quien miraba con atención cada movimiento; se perfila como una figura clave en el futuro político de Jalisco. Villanueva, quien dejará la rectoría de la UdeG en abril, se sumará a las filas del claudismo y del morenismo. Esto podría significar un ascenso en su carrera política y, posiblemente, asumir el liderazgo que necesita la 4T en Jalisco. La pregunta es, ¿está listo para liderar el cambio en la región?
Que la administración de Juan José Frangie en Zapopan está lanzando una campaña para dar chips a mascotas para mejorar su bienestar y seguridad. Se espera repartir más de 2 mil dispositivos y ya hay alrededor de 300 mascotas inscritas. El nano dispositivo subcutáneo se aplica en el lomo de la mascota y contiene un número de identificación que se puede escanear en cualquier veterinaria; también se dará una placa con un código QR que permitirá acceder a los datos de la mascota; funcionará como una cartilla de salud digital y tarjeta de identificación.