Que con lluvia y todo, ayer fue día de manifestaciones en Toluca, municipio que está de plano para llorar en muchos aspectos, ante la mirada complaciente del alcalde Juan Maccisse, que sólo acude a algún lugar si es para sacarse una foto lucidora.
Primero, los vecinos de la zona norte, de Sauces y Galaxia, que están hartos de las calles llenas de cráteres, salieron a exigir que el presidente municipal se ponga a trabajar. Luego, tras un operativo contra presuntos delincuentes en el área de la terminal de autobuses, las protestas de familiares de los detenidos (muchos de ellos por "obstrucción de la justicia) colapsaron el Paseo Tollocan.
Que está clara en ambos casos la negligencia de la autoridad municipal, pues la ciudad entera está con el pavimento hecho pedazos, y el segundo asunto es el producto de dejar crecer la inseguridad y luego querer taparle el ojo al macho agarrando parejo. Ya se ven venir los "usté disculpe" y que las cosas sigan igual, mientras los agentes locales siguen clavando el diente a la ciudadanía con cualquier pretexto vial.
Que la diputada Miriam Silva Mata del PVEM, presidenta de la Comisión de Recursos Hidráulicos de la LXII Legislatura, puso el dedo en la llaga propuso construir un nuevo marco jurídico para garantizar el derecho al agua. Con los ajustes que podrían venir en el primer equipo de gobierno, no son pocos los que miran precisamente hacia la Secretaría del Agua, cuyo titular Pedro Moctezuma no termina de cuadrar una estrategia de corto plazo ante lo apremiante de la situación, aunque se hable de planes a futuro.
Mientras, la problemática se agudiza: comunidades y hasta municipios enteros que la reciben a cuentagotas o les llega el líquido de muy mala calidad. A ver cómo pinta el tema durante el resto de este año.